Esta vez el museo
municipal de Bellas Artes creado ese año en su recinto. El certamen se prolonga hasta, 1924, ya con el título de
VII Salón de Rosario, al comenorase el segundo centenario de la ciudad.
Los certámenes se
realizaron en el flamante edificio del Museo Municipal de Bellas Artes,
costeado y entregado a la custodia de la ciudad por doña Rosa Tisconia de
Castagnino en memoria de su hijo Juan B. Castagnino, cuyo nombre recibe la institución por decisión de la comuna.
Juan B. Castagnino se
había distinguido como generoso protector del actor y de los plásticos rosarinos y había reunido
una valiosa colección que, varios años después, sus hermanos donaron al museo
en su memoria. En ella se encuentran obras de El Greco, Goya, Ribera y el
Españolero entre otros.
Entre los escritores
que se destacan en este período merece una mención especial Emilio Ortiz
Crognet, autor de las novelas “Susana”, “El mejor tesoro” y “El Conjuro”.
Además escribe poemas notables con su celebre “Canto de Rosario” y pública
artículos en diarios y revistas.
Enrique García
Vallejos, otro rosarino, que se destaca en este ámbito, es designado miembro de
la Academia Argentina
de Letras y honrado varias veces con la presidencia de Club de Autores. Sus
obras constituyen verdaderos clásicos por su estilo y su inagotables facundia.
Fuente: Extraído de la Revista del diario “La Capital” de los 125 años de 1992.-