Pasan por Rosario las revoluciones de 1890 y 1893, cuyos encarnizados caer combates ponen a prueba a rosarinos y porteños. En la primera de las nombradas cae el presidente Juárez Celman y el vicepresidente Carlos Pellegrini, asume la primera magistratura. La segunda, alentada por radicalismo, termina con la deportación de Yrigoyen a Montevideo, la prisión de Leandro N. Alem pese a sus inmunidades parlamentaria como senador, y el nucleamiento de la clase obrera movimiento organizado. La exportación de trigo supera el millón de tonelada
Pero esto no repercute en mejores niveles de vida
En 1891 un peón calabrés llamado Antonio Cocoliche, divierte sin saberlo con su
manera de masticar el idioma castellano. La compañía Scotti-Podestá advierte en el un personaje representativo del momento y hace que uno de sus actores lo imite, a fin de incluirlo en el Juan Moreira. Cocoliche, es un éxito y una palabra nueva para el idioma del país.
"Ese mismo año construye Giglione en Rosario. el teatro La Comedia, que en
Marzo de l901 pasará a poder de Seguin, empresario que tiene intereses en distintas partes del mundo, dentro de los más variados aspectos del espectáculo. Seguin le cambia el nombre al teatro. poniéndole Casino, pero éste no se arraiga, va a subsistir aquel de La Comedia en el emplazamiento de Mitre y Ricardone, aunque habrá de ser demolido por completo para dar paso al que conocerán generaciones posteriores. Historial nutrido y de relieve aporta a la vida teatral rosarina y del país. Los Errausquín. que adquieren el edificio, van a entroncar con ese historial.
"En la calle Libertad (Sarmiento), entre las de San Juan y San Luis funciona desde
1883 el Teatro Recreo. Lo ha inaugurado un" Compañía Automática dirigida por
Misericordia Campana. Un cronista del momento ha demostrado su disgusto por el espectáculo derramando crueldad entre sus ironías. “Hay que hacer sonar esa campana - ha escrito - para pedir Misericordia por ese triste espectáculo.”
"En 1899 se construye el Nuevo Politeana que no es más que un galpón levando
a metros de la calle Mitre, entre las de Córdoba y Santa Fe. Para acceder a la sala
es necesario cruzar un ancho patio. Aludiendo a este detalle, un cronista apunta: En los días de lluvia, un toldo endeble haced 'desesperados - y no siempre logrados
esfuerzos para protege a los concurrentes.” En ese galpón, la historia del desarro_
llo teatral rosarino vivirá episodios inolvidables. Allí, donde tres años después Florencio Sánchez quiso entrenar su primer obra La buena gente, que el oficialismo prohibió pues se trataba de una sátira al gobierno, allí decíamos, tuvo lubar el estreno en toda la Argentina la ópera Tosca
Contemporáneo del Nuevo Politeama, es el teatro Variedades, que "remozado
por su propietario Giménez, se inaugura en agosto ce 1901 como Teatro Cómíco. allí se albergarán con frecuencia a elencos del género chico español. Ubicado en cortada del Mercado - luego Barón de Mauá -, desaparecerá como consecuencia del desatino de cerrarse a todo nivel discreto artístico para ofrecer exhibiciones que no puede calificarse. De su existencia no quedará otra cosa que un frente morisco que llamó por muchos años la atención de quienes ignoraban que había pertenecido a un teatro y observaban el local en qua funcionaba una fábrica de hielo, el Frigorífico Cel!e y Cía.
"En 1917 el Nuevo Politeama fue demolido. Al demolerse dejó sus raíces. En el mismo solar se edificaría el Teatro Odeón.
En 1902 un acontecimiento destacado y que trascendió incluso fuera del país, lo constituye el estreno de Canillita, la obra de Florencio Sánchez con música de Cayetano Silva que sube el escenario del Teatro La Comedia.
Fuente: Fragmento extraído del Capitulo N• 5 “ Por amor al arte” del Libro Rosario era espectáculo ¡ Arriba el Telón! . Autor Héctor Nicolás Zinni, Ediciones del Viejo Almacén – Año 1997.-
