La versión de una supuesta estadía de Aristóteles
Onassis en Rosario, y tal vez en la zona prostibulario, en la década del 20 no
es para nada imposible si se piensa que el luego multimillonario armador
griego embarcó en el buque de inmigrantes "Tomaso di Savoya" el 27
de agosto de 1923 y vivió en Buenos Aires hasta 1931 -año en el que fue
designado cónsul suplente por el gobierno griego-desempeñando diversos empleos:
lavaplatos, empleado en una lavandería y luego en la British Unitel River Píate
Telephone Company la central Avellaneda.
Onassis se
radicó primero en él barrio de la Boca, alquilando un cuarto sobre un salón de
baile, para pasar luego a una pensión de Avda. Corrientes, entonces angosta, y
después a una de calle Esmeralda. Frecuentó al "zar" de las empresas
marítimas, Alberto Dodero y conoció entonces los entretelo-nes del negocio de
barcos de transporte que lo enriquecería posteriormente.
La atracción de la vida
prostibularia sobre este griego casi de leyenda, le venía de su adolescencia en Esmirna, donde
frecuentaba asiduamente los prostíbulos del barrio Demiri Yolu, con sus camas de latón, y luego,
de su vida en París, en el burdel de madame Claude. En Rosario, por su parte, sobre todo en la
zona de Saladillo, muchos griegos se radicaron para dedicarse al comercio y hasta no
hace muchos apellidos como Pilafis, Psarianos, etc., eran rastreables en ese
barrio rosarino.
Fuente:
extraído de la revista “Rosario, Historia de aquí a la vuelta Fascículo
Nº 8 de Diciembre 1990. Autor: Rafael Ielpi