Escudo de la ciudad

Escudo de la ciudad
El escudo de Rosario fue diseñado por Eudosro Carrasco, autor junto a su hijo Gabriel, de los Anales" de la ciudad. La ordenanza municipal lleva fecha de 4 de mayo de 1862

MONUMENTO A BELGRANO

MONUMENTO A BELGRANO
Inagurado el 27 de Febrero de 2020 - en la Zona del Monumento

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viernes, 29 de junio de 2018

LA EMPRESA MUNICIPAL EN FUNCIONES



El 15 de septiembre de 1932, sin conocer las particularidades de aquella actividad, EMMTR toma a su cargo el servicio tranviario. No hay en el local de la Compañía libros, planillas ni útiles-.Con la recaudación del primer día (8.284,90 pesos) se organizó la imprescindible contabilidad.

Los ómnibus, en su mayoría precariamente acondicionados, fueron adquiridos en los primeros meses de gestión, a un precio promedio de 11.200 pesos cada uno. Un mal negocio, por el estado de las unidades. Para abastecer de energía al sistema tranviario, a su vez, EMM1'R firmó un contrato con la empresa SER (Servicios Eléctricos del Rosario), que dependía del grupo SOFIMA, a su vez dueño de la Compañía General. Paradójicamente, de ese modo, los nuevos empresarios volvían a depender de los antiguos...

Si bien los coches presentaban un aceptable estado, no ocurría lo mismo con la red de vías, que no había tenido un mantenimiento adecuado y se encontraba casi intransitable en algunos sectores, como el ramal a Alberdi, lo que producía frecuentes accidentes y descarrilamientos.

La nueva empresa —que el público conocería siempre como la la Mixta— inició sus actividades con una flota de 271 tranvías (121 grandes. 90 medianos y 60 chicos) y 21 ómnibus de distintas marcas y modelos, agrupados en 12 lineas. Tal variedad la llevaría prontamente al descalabro económico, pues no hay peor negocio para una empresa de transporte que la diversidad de unidades, por el arsenal de repuestos necesarios y la mano de obra especializada que cada vehículo requiere. De cualquier manera, la Mixta trabajó con entusiasmo, comenzando la fabricación de coches en sus talleres, con un coche mediano de 32 asientos, al que denominó 272.

También fueron tendidas nuevas líneas, llegando otra vez el tranvía hasta Saladillo, pero por otro recorrido; un ramal a Pascual Rosas, otro a Ludueña y una extensión de la línea 26 por Ovidio Lagos hasta Muñoz. Paralelamente, una larga querella con la Compañía General llegaba a su fin cuando el intendente Culaciatti firma el decreto correspondiente, el 16 de agosto de 1936, disponiendo el pago a la CGTER de un monto por todos sus bienes, en 34 cuotas anuales que incluían amortización e intereses.
Fuente: Extraído de la Revista “ Rosario Historia de aquí a la vuelta”. Fascículo N.º 14, de Julio 1991. Autor: Juan Carlos Muníz.

jueves, 28 de junio de 2018

LA REVOLUCIÓN DEL 30 Y SU MANO DURA



La llegada autoritaria de Uriburu al poder se traduce en la imposición de un nuevo comisionado en Rosario. Corre el año 30 el funcionario, imbuido del espíritu dictatorial vigente, comienza a tomar rápidamente medidas arbitrarias. En un mes decide el levantamiento de vías en Avenida San Martín, cambio de rieles en el centro y otras modificaciones que sólo acarrearían trastornos mayores al servicio.

Este funcionario es reemplazado poco tiempo después por un segundo, que llega esta vez con ánimo negociador. Comienzan las tratativas con la CGTER en busca de acuerdos y hay un intento de regular en parte la competencia desleal de los ómnibus. Una inspección determinó en 1923 que de los 256 ómnibus existentes, sólo 16 estaban en condiciones de cumplir un servicio digno...

La CGTER envía un ultimatum el 10 de febrero de 1932 informando al Comisionado que "no se encuentra en condiciones de seguir prestando el servicio para el que-

fuera contratada, por lo cual se vé obligada, materialmente obligada, y muy a pesar suyo, a suspender el servicio de tranvías en el día de la fecha después de un cuarto de siglo en que ha servido a la población de Rosario..."

El 11 la amenaza se cumple y no rueda ni ún solo tranvía por las calles rosarinas. El mismo mes asume un nuevo intendente, Esteban Morcillo, tras las elecciones generales, quien el día de su asunción intima a la compañía a restablecer el servicio, pero la respuesta es negativa.

El paro de CGTER se prolonga durante 27 días y la Municipalidad da libertad de circulación a todo vehículo que se quiera afectar al transporte de pasajeros. Las calles se llenan de carricoches desvencijados moviéndose en completa confusión.

En el mes de abril, por Ordenanza Nº 30 del Concejo Deliberante se crea la Comisión Fiscalizadora de los Tranvías Eléctricos del Rosario, que toma una drástica medida: municipalización de todo el sistema de transporte urbano, incluyendo los ómnibus. Nace así la Empresa Municipal Mixta de Transporte del Rosario (EMMTR), ente monopólico que tiene entre sus atribuciones la de comprar las instalaciones de la CGTER y los ómnibus circulantes. El pago a la compañía tranviaria se fija en 38 cuotas anuales, correspondientes a los aflos de concesión que faltaban. Era el principio del fin para el tranvía.

Fuente: Extraído de la Revista “ Rosario Historia de aquí a la vuelta”. Fascículo N.º 14, de Julio 1991. Autor: Juan Carlos Muníz.

martes, 26 de junio de 2018

ASOCIACIONES ITALIANAS



La colectividad italiana dio origen también a distintas instituciones ligadas a la misma a través de acciones de ayuda y solidaridad o de preservación de las raíces con la tierra natal.

La Casa de Italia, en Buenos Aires 2524, fundada el 18 de octubre de 1941 como fusión de otras entidades de original raigambre fascista, congrega actualmente la tarea del Centro Familia Campana de Rosario, grupo siciliano Arquímides y Club Juvenil Forzaragazzi. Cuenta con 200 socios y un grupo folklórico, ofreciendo la institución cursos de idioma italiano y de yoga.

La Asociación Patronato INCA/ CGIL (Instituto Nacional Confederal de Asistencia, dependiente de la Cámara General Italiana del Trabajo), tiene sede en Roma y cuenta con filiales en todo el mundo. En nuestro país las hay en Buenos Aires, Mar del Plata, Córdoba, La Plata, Campana, Bahía Blanca y Rosario. En nuestra ciudad su sede de Córdoba 3050 ofrece servicios gratuitos, en especial para ayuda a veteranos de guerra, indigentes o migrantes, para la tramitación dejubilaciones, pensiones, etc.

Finalmente, la FITEF (Federación Italiana de Trabajadores Emigrados y Familia), con
sede en Rioja 1150, 32, Oficina 3, tiene como función la protección y ayuda a los inmigrantes italianos, facilitándoles en lo posible la búsqueda de ocupación laboral.
Nacida para defender las acciones democráticas y antifascistas, tiene su sede central en Roma, con un importante departamento de estudios de investigación económica, social, política y escolar.

Fuente: Extraído de la Revista “ Rosario Historia de aquí a la vuelta”. Fascículo N.º 22, de agosto 1992. Autora: Alicia Megías.

viernes, 22 de junio de 2018

El 'Toríto" Aguirre

Por Jorge Brisaboa



Rebelde, transgresor, con toda la picardía y la viveza ganada en la calle. Un "canalla" a la medida de los "canallas": Waidino Aguirre. El "Torito".

Para aproximarse a él vale el tiro libre que pateó, jugando para Central, contra su propio arquero. Central enfrentaba a Chacarita en Arroyito, a metros del arco que da a Regatas el árbitro cobró un foul a favor de los "funebreros". Mientras algunos de sus compañeros protestaban y Otros pedían distancia, el "Torito" pateó la pelota contra su arco. Los jugadores de Chacarita tardaron en reaccionar, y el referí —de espalda a la pelota— no se dio cuenta. El juego siguió.

Aguirre le gambeteó a la vida desde chico. La carencia de los afectos la volcó en los potreros. Fue llevado a Central Córdoba, y cuando Vicente De la Mata dejó la quinta división él tomó la posta. Los hinchas "charrúas" iban a ver tanto a esa quinta como a la primera. Llegó a la división superior y en 1941 fue comprado por Rosario Central.

Junto a Rubén Bravo ofrecieron un halo de esperanza entre la desesperanzada hinchada que veía cómo el equipo se iba al descenso. En su debut, al igual que Bravo, se mostró amigo de la red. Y en el 42, ambos fueron las figuras. Convirtió 32 goles en 27 partidos, fue goleador del torneo. En dos encuentros, marcó seis goles. Pero, tan importante como sus goles era la forma en que divertía y seducía a la hinchada "canalla".

Deslumbraba por la habilidad en velocidad así como por sus desplantes a los adversarios, o a los mismos árbitros. Claro, a veces tenía que pagar caro por sus actitudes.

Llegó a luchar el primer puesto en la tabla de goleadores en el 45, pero lo superó el riverpiatense Angel Labruna que señaló 25 goles. "Yo hice 21 y ninguno de penal, Labruna pateó como cinco penales", recordaría del otro lado del alambrado, veinte años después, debajo de la tribuna de mujeres en un domingo de fútbol de primera.

Solía vérselo con un diario debajo del brazo "para que no se aviven que soy analfabeto", según explicaba socarronamente.

El romance con los centralistas tuvo una pausa. Es que Racing no dejaba de mirar a Central. Como en la década del 30 con el "Chueco" García, en la del 40 ya se había llevado a Rubén Bravo, Héctor Ricardo y Alejandro Yebra. Hasta que en 1947 adquirió al "Torito" Aguirre en 80.000 pesos, un poco más de la mitad de lo que en el mismo año Atlanta había pagado por el gran Adolfo Pedernera a River, 140.000 pesos.

El "Torito" fue a juntarse, de nuevo, con el "Maestro" Rubén Bravo.

Pero a los dos años, tras vestir las camisetas de Racing y Huracán, retomaría el romance con Central y su hinchada. Hasta que una tarde, en cancha de Newell's, sacó chapa definitiva de "canalla".

Los hinchas "leprosos" lo cargaban, lo gastaban. Newehl's estaba ganando. De pronto un invento y el empate. El "Torito" grita su gol, y quiere más, busca más para tomarse revancha. Reacciona sobre la marcha, como cuando avanzaba con la pelota al pie y frenaba de golpe para que su marca pasara de largo: ahí va, se acerca a la platea de mujeres, se baja el pantalón, y... lleva sus manos a los testículos.

El periodismo dirá que es un gesto antideportivo, la aristocracia rosarina comentará al día siguiente que no se le puede pedir otra cosa a un negro del barrio Tablada. La policía lo llevará detenido.

El "Torito" Aguirre se cagará de risa.
Fuente: Artículo Publicado en el libro “ De Rosario y de Central , Autor: Jorge Brisaboa Impreso en Noviembre 1996 por la Editorial Homo Sapiens.

jueves, 21 de junio de 2018

WALDINO "TORITO" AGUIRRE



Hablarle a un rosarino cincuentón de "Torito" Aguirre es producirle gotas de brillo en las pupilas, encenderle luminosas antorchas de alegría en lo más hondo del corazón. Provocarle un regocijo que —suponemos— habrá sentido cada uno de aquellos que tuvieron la fortuna de verlo en acción durante las nueve temporadas que jugó para Rosario Central y las que también lo tuvieron como protagonista estelar con la camiseta de Central Córdoba.

Para hacer una semblanza meramente ajustada a los hechos bastaría recurrir a los números. Decir que el "Torito" jugó 182 partidos con la azul y amarilla y que —con 95 goles— fue el futbolista que más tantos convirtió para Rosario Central en el ciclo profesional. Pero eso no basta para pintar la estampa de este jugador fenomenal, que en 1947 se fue transferido a Racing. Ni siquiera encontrándose allí al lado de viejos y estelares compañeros como Rubén Bravo, el "Negro" Ricardo y Alejandro Yebra dejó de extrañar a Central. Un año después, pobre de fútbol y de goles racinguistas, apareció en Huracán, también junte a Ricardo. Aguirre, el fabuloso "Torito" estaba en otra cosa. Y en 1945 volvió a su viejo club; a reencontrarse con su público, con su gente, con su barrio sur, allí donde en :ple no corazón de Tablada había comenzado una carrera rutilante que lo llevó a la fama desde muy joven.

Nos cuentan que, en realidad, la fama del "Torito" empezó cuando aún era niño. Viejos charrúas fueron testigos presenciales del fútbol rosarino del '30 aseguran que mu-. chísimos hinchas se aparecían sin concierto previo para ver lópartidos de quinta división. Especialmente cuando jugaban Central Córdoba y Rosario Central, porque allí se enfrentaban dos purretes que serían famosos: Vicente de la Mata, con la camiseta azul del club de Tablada, y Harry Hayes, con la azul y amarilla de la entidad de Arroyito. En esa quinta que dejó un día De la Mata apareció Waldino Aguirre. La historia volvió a repetirse: los hin. chas charrúas se regocijaron durante años con el dITritot, cualquiera fuera la división en que jugase. En primera, junto a Fiore y Monestés, integró un terceto muy recordado. Hasta que en 1941 comenzó a jugar para Central, adonde llegó con otro compañero charrúa que por muchos años se asentaría en Arroyito José Casalini. Desde aquella inolvidable 21 fecha del torneo de ese año —jugada el 6 de abril de 1941—Aguirre inició un largo y apasionado romance con la hinchada auriazul. El "Torito" no quiso esperar y ese mismo día le ganaron a Platense uno a cero; fue el autor del único tanto. Le tocó saborear el trago amargo del descenso. Pero estaba hecho para soportar todas las adversidades. Y fue el abanderado de un retorno que se produjo al año siguiente, tras una campaña excepcional, que lo encontró goleador absoluto del torneo, con 32 tantos en 27 partidos. Todo un récord, con alguna particularidad: en dos encuentros de ese certamen conquistó 6 goles, en otro 4. Siguió en primera haciendo goles. Pero —fundamentalmente— jugando; divirtiendo a la enfervorizada masa de simpatizantes que le perdonaba todo, hasta su poca ortodoxa manera de dirigirse a les árbitros o a sus propios adversarios, lo que más de una vez lo dejaba fuera de actividad.

Cuentan quienes lo vieron en el apogeo de sus actuaciones que no hubo un jugador igual. Parecía no tener habilidad en las piernas; pero lanzado en velocidad era imparable; daba la impresión que los contrarios se apartaban de su camino, tan sutil y perfecto era el movimiento de su cintura mágica que dejaba el tendal en su ruta hacia el arco adversario.

La vida del "Torito" no fue fácil. Desde niño le faltó de todo; casi con seguridad y fundamentalmente, cariños, afectos; amor. Por eso quizás se volcó totalmente hacia el fútbol y se jugó el alma en cada pelota, gritó con todas sus ganas la intención de tomarse la revancha en cada gol, en cada amague. Por eso también, terminado el fútbol, se terminó todo para este formidable jugador. El destino, que tanto lo había escarnecido durante su infancia, lo esperaba al término de su ciclo esplendoroso. Ya no estaba su público, su hinchada, ya no estaba la pelota —su mejor y más obediente compañera— como tampoco el adversario burlado, ridiculizado por la mágica cintura del "Torito". Estaba otra vez la calle, la mala bebida, las peores compañías, el triste sino que había retomado un camino de sombras y, otra vez, de privaciones.

Y una noche de octubre de 1977 la cuerda se rompió. El "Torito" fue detenido por un supuesto robo menor. Borracho, vencido, entregado, fue golpeado brutalmente por un par de malos policías y murió. Hubo una farragosa y larga investigación que terminó con severas condenas para los culpables. Y hubo, esencialmente, una silenciosa y auténtica congoja de miles de charrúas y canallas hermanados por el dolor de haber perdido a un ídolo, para muchos, el más extraordinario jugador que se haya visto en una época donde había sobre abundancia de cracks. Dejó en Central un recuerdo inolvidable mereciendo su nombre y su figura un sitial preponderante en la galería selecta de sus ídolos más queridos.

Fuente: Extraído de la Colección de Revista de Andrés Bossio.

lunes, 18 de junio de 2018

AGUIRRE, WALDINO Futbolista ( 1920-1977)

Miguel Pisano



POETA DE LA REDONDA

Jugó con Gabino Sosa y Capote de la Mata rn Central Córdoba y fue ídolo de Central en los 40. Guapo y encarador tanto en el área como en la vida, el Torito tuvo un trágico final: lo mató la policía en la última dictadura.



Cómo habrá sido tocado por la varita mágica del fútbol que Waldino Aguirre fue discípulo de Gabino Sosa y compa­ñero de Capote de la Mata en Central Córdoba, donde llegó luego de pasar por otros bravos clubes de Tablada
como La Aurora y La Unión.

El barrio era a principios del siglo pa­sado un montón de campos de ganado con las tabladas de los mataderos, caminos polvorientos con arrieros, generosas quin­tas e innumerables canchas de fútbol.

El Torito era un flaquito morocho há­bil, escurridizo y encarador, que se ganó el mote por su guapeza para encarar al área. De pibe llegó naturalmente a jugar en Córdoba. Allí protagonizó partidos me­morables en la quinta, donde reemplazó a Capote de la Mata. Y en el 41 pasó a Central, donde libró duelos en los clásicos con Angel Perucca, el Portón de América, y con el Vasco Zubieta, de San Lorenzo.

Allí se ganó a los canallas por su ha­bilidad de potrero, su coraje a prueba de golpes y su irreverencia ele barrio.

Si le pedían que contara dos momentos de su carrera elegía un golazo en un 3 a 1 a Boca, con sombreritos a Marante, De Zorzi y Vacca, y otro a Newell's, cuando Mussimesi ni la vio. "Al recibir el pase, pocos metros delante estaban Marante y De Zorzi. Levanté rápido la pelota por sobre sus cabezas. Me filtré entre ellos. Vacca salió del arco y repitiendo la jugada también a él se la hice pasar suavemente por encima. Me quedé quieto y miré la trayectoria de la esférica. La explosión de la tribuna certificó el gol", contó en La Capital. "Y el otro fue aquel gol contra Newell's que le hice a Mussimesi. ¡Cómo olvidarlo...! De Cicco mandó un centro desde la derecha que tomé a la carrera y de volea. La pelota entró como un bala­zo", recordó. Y junto a ellos un fotógrafo del diario confió que Mussimesi les dijo: "¡No vi la pelota! ¡Vi la sombra, nada más! ¿Por dónde entró...?".

Waldino jugó nueve temporadas en Central y se erigió en el máximo goleador canalla. En 182 partidos metió 95 goles y fue el jugador que más convirtió desde el profesionalismo, según canalla.com. Luego jugó en Racing con el inolvidable Rubén Bravo, y en Huracán, Perú y Co­lombia, hasta que ya vuelta lo hizo en el campo.

"El Torito era un fenómeno como jugador y como persona, lástima que tomaba dos copitas y se mamaba. Jugábamos en San José de la Esquina y después de los partidos nos invitaban a comer un asado. El Torito se sentaba a tomar vino tinto y se ponía una toalla sobre los hombros porque transpiraba como loco", recuerda la Chancha Piraíno.

A los 57 años parecía mucho más grande y vivía de la limosna, de los recuerdos y de las chirolas de la gloria en un viejo vagón de tran­vía, en Necochea al 4300, en el corazón del barrio La Bajada, hasta la infausta noche  del 27 de octubre de 1977, cuando fue detenido por su vinculación con el secuestro de una chi­ca, en el que no había participado, según cuenta Osvaldo Agui­rre en La Capital.

Derrumbado por el alcohol fue detenido en un taxi por dos agentes de la seccional 11º, que luego lo torturaron y ase­sinaron a golpes en compa­ñía de un subcomisario.

El Torito fue uno de esos jugadores de Central que me hubiera gustado ver, junto al Ta­to Mur, a Rubén Bravo y a Pancita Biagioli. Poeta de la redonda, tuvo el trágico final de muchos grandes.
Fuente: Extraido de la Revista del diario "La Capital" de 140 aniversario de 2007.-

viernes, 15 de junio de 2018

WALDINO AGUIRRE



El Torito tuvo siempre la marca del potrero. Máximo goleador de Central en el Profesionalismo. Lo asesinó la Policía.


Nombre y apellido: WALDINO AGUIRRE. 

Nació: 16/8/1919 en Rosario. 

Jugó: 191 partidos entre 1941-1946 y 1949-1951. 

Goles: 97 (6 a Newell's). 

Títulos: O.


Pasó su infancia en los potreros del barrio de La Tablada. Se destacaba en la Quinta de Central Córdoba cuando Central lo fue a buscar. Debutó en Primera en 1941 y ese año metió 10 goles, pero el Canalla bajó a Segunda. 

En 1942, el Torito metió 32 goles en 27 partidos para ser el goleador y llevar a Central otra vez a Primera. Aparentaba poca habilidad, pero lanzado en velocidad era imparable. 

En 1947 pasó a Racing y en 1948, a Huracán. Retornó a Central en 1949 y fue protagonista de una polémica: Newell's iba ganando el clásico, Waidino empató y festejó frente a la platea femenina, se bajó los pantalones y se tomó los testículos. Lo sacaron detenido de la cancha. 

En el 50 bajó a la B, retornó a Primera al año siguiente y se retiró. Es el máximo goleador de Central en el Profesionalismo. Tras su retiro tuvo problemas con el alcohol y vivió durante años como un mendigo. Hasta la madrugada trágica del 28 de octubre de 1977: fue detenido como sospechoso de un robo y murió horas después por una golpiza en la Seccional 11. Los policías que lo asesinaron fueron condenados a más de 10 años de prisión.
Fuente: Extraído de la Revista “ El Grafico” Libro del Colección / Edición Nº35/Febrero de 2012

jueves, 14 de junio de 2018

LO QUE TERMINA, LO QUE SE VIENE, LO QUE SE VIVE

Por Héctor N. Zinni



Las fronteras de Europa no son definitivas, como creen los primeros ministros francés y británico. En el mes de marzo, todos los checos pasan a depender de Berlín. Bohemia y Moravia se convierten en protectorado alemán, y en la sesionada Eslovaquia —que había proclamado su independencia—, monseñor Tiso pone el país a disposición del Reich. En el mismo mes Alemania exige de PolQnia la anexión del Dantzig y del corredor contiguo. Pero, el gobierno polaco se siente seguro con la amistad de británicos y franceses.

Recorriendo el mapa europeo más abajo, al sudeste, nos encontramos que sólo han bastado 24 palabras para anunciar una victoria que exigiera 32 meses de lucha feroz: "En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado' El parte, que lleva la firma de Francisco Franco, está fechado en Burgos, 10 de abril de 1939.

La guerra, en verdad, había terminado un año antes., cuando las fuerzas sublevadas llegaron al Mediterráneo y cortaron en dos a la República; en todo caso, ya nada era posible tras la toma de Barcelona, el 26 de enero siguiente. Sin embargo, la contienda iba a tener un final simbólico: la caída de Madrid.

El 28 de marzo de 1939, Martes de Pasión, a las once de ¡a mañana y escoltado por tres oficiales, tres guardias civiles y tres soldados, el coronel Adolfo Prada rinde el Ejército del Centro ante el coronel Ríos Capapé en una oficina del hospital Clínico, dentro de la ciudad Universitaria. Formalizada la capitulación, Prada y sus acompañantes quedan arrestados en el Hogar del Combatiente. La bandera franquista ondea ya en el ex Ministerio de Hacienda, la sede de las últimas autoridades republicanas.

Desde el alba, la capital hierve. Silenciosa, lúgubre hasta unas horas antes, sus pobladores la transforman en un yacimiento de algarabía. . Los falangistas dejan su encierro y los espías --la Quinta Columna— su largo anonimato; de las embajadas y de las cárceles salen refugiados y prisioneros. Racimos de hombres y mujeres se apiñan en la Puerta del Sol: para unos es el triunfo de la causa; para otros, la clausura del hambre, la miseria, los Padecimientos. Vastas muchedumbres se dirigen a la Ciudad Universitaria, donde acampan las divisiones del general Eugenio Espinosa de los Monteros. Son las dos, y media: una vanguardia al mando del coronel' Losas invade la capital; junto a él marcha su colega Ríos Capapé.

Luego, en un desfile con sabor a gloria, el resto de las unidades se; adueña de Madrid; el único funcionario presente, Melchor Rodríguez, un anarquista, entrega la Municipalidad a Espinosa de los Monteros. Así, sin disparar un solo tiro, el Gobierno de Burgos conquista el mayor de sus objetivos, perseguido desde noviembre de 1936. Entonces, al grito de —¡No pasarán!­, los habitantes y las escasas tropas republicanas detuvieron la ofensiva sediciosa. El 28 de marzo del 39, otro es el lema que se corea: "¡Han pasado!” 1

"—.El fin de la guerra, dónde lo sorprendió? —En Valencia.

—All (entraron las tropas de Franco.

—Entraron las tropas de Franco. Al principio, pensé que no pasaría nada, Pero pasó lo que pasa siempre. Durante la guerra había crecido mi popularidad a tal grado que hasta las consignas de los puestos de mando y centinelas se hacían en base a mis canciones. Cuando terminó la guerra comenzaron a decirme que los nacionalistas se iban a meter conmigo. Yo les respondía: "Por qué?. Si yo no he hecho maí que cantar y bailar?­ Pero tenía ese primer plano imperdonable. Y surgió un salvador, un empresario que era hermano de un militar de los del mando de Franco. —Cómo se llamaba?

—Se llamaba Aranda.

—¿Hermano del general Aranda?

—Exacto. Luis se dedicó a los negocios teatrales y fue él quién me contrató e hice una gira por la región de Valencia. El producía, pero quien dirigía era don Vicente Prieto, que más tarde tuvo una gran importancia en el espectáculo español.

—Entonces, se acabaron los problemas.

-¡Qué se van a acabar!. Seguí con problemas porque Carcellé quería hacer valer su contrato que había quedado en suspenso por la guerra,

como usted verá, una causa de fuerza mayor. Además, con Aranda estaba un poco menos que atrapado. Hicimos una gira por toda España pero con un cachet que ya se puede usted imaginar, un cachet de miseria. Yo agarré lo que me dieron. Era la única solución para que me dejaran tranquilo. Me presenté en Madrid tres o cuatro veces. Cuando yo terminaba la gira, precisamente en Valladolid, le dije que nuestro compromiso había caducado y que quería más plata.

—Y entonces?

—Ahora va a ver. Decidimos hacer la despedida en Madrid. Volvimos a Madrid, al Teatro Pavón, una sala muy popular. Teníamos programadas

dos funciones, una a la tarde y otra a la noche. El teatro estaba totalmente vendido. Pero entre la función de la tarde y la de la noche vinieron unos tipos, me sacaron del teatro, me maltrataron, me hicieron de todo. —¿Por qué?

- Ah!. Eso es lo que me pregunto yo. Porque no había hecho la guerra con ellos. En fin, un episodio muy desagradable. Y allí sí comenzó mi

calvario. Tuve que dejar de trabajar. Mi empresario, ante el éxito de Madrid, quería que cumpliera e! contrato. Tuve que esperar cuatro o cinco semanas para reponerme de la terrible paliza que me dieron y sobre todo del terror que me metieron en el cuerpo, porque yo creía que me habían matado (sic). Cumplí mi contrato de Madrid y al terminarlo, pues, el Director General de Seguridad me dijo: "No puedes trabajar más en la capital' Y me mandó, como desterrado, a unos cuantos kilómetros de Madrid, a Cáceres. ....2




Como consecuencia de la guerra que ha desangrado a nuestra Madre Patria, sobreviene un éxodo de escritores, periodistas, artistas y gente de los más variados oficios y ocupaciones hacia el Continente Americano.

Argentina recibe una cuota considerable de emigrados, entre ellos -.-por nombrar a uno— se encuentra el escenógrafo Gori Muñoz, quien se afincará definitivamente en nuestro país a partir de este año. Cuando llega junto con otros compatriotas suyos, entre los que viene el dibujante Arteche, se le impide el desembarco a todos por no tener autorización de las autoridades de inmigración. Pero la intervención del director de Crítica, Natalio Botana Zárate, logra que el escollo sea superado. Es que Botana ha asumido la responsabilidad acerca del trabajo que los recién llegados tendrán para sostenerse.

Con anterioridad, algunos emigrados han llegado a Rosario y otros se aprestan a hacerlo en momentos en que el obispo de la segunda ciudad de la República, monseñor doctor Antonio Caggiano, bendice e inaugura el 16 de abril, el Seminario San Carlos Borromeo, así denominado a pedido del Papa Pio XI con motivo del cuarto aniversario del cardenal italiano, patrono de los seminarios. Bajo el rectorado del padre José Camy se hacen cargo de dicha casa de estudios los padres del Sagrado Corazón, conocidos por padres bayoneses por ser este puerto de Francia el lugar de embarque de los primeros sacerdotes de esta orden que arribaron al país.

El otoño se presenta con una carga de inestabilidad que aburre a los rosarinos. El 9 de mayo, como. consecuencia de las prolongadas lluvias, se derrumba el muro exterior del cementerio El Salvador que da sobre la avenida Godoy, en una extensión de once metros y desde la calle Suipacha hacia el Este, quedando al descubierto numerosos ataúdes hacia la vía pública. El accidente apresurará la ejecución de un proyecto elaborado en 1929 para la construcción de nichos en tres plantas de galerías, una de ellas en subsuelo.

A las pequeñas anécdotas lugareñas, Europa responde con sucesos trascendentales para la marcha de la humanidad: el 22 de mayo se firma en Berlín el Pacto de Acero entre Italia y Alemania. En la Cancillería del Reich, el conde Galeazzo Ciano, ministro de Asuntos Exteriores —yerno del Duce, casado con su hija mayor Edda— que ingenuamente deja en manos de los nazis la redacción dei tratado, concede a Joachim von Ribbentrop, su par alemán, el Collar de la Anunziata, que el tedesco ex vendedor de champaña agradece con su acostumbrado gesto mezcla de empaque y desenvoltura. "A Goering —escribirá más tarde Ciano en su Diario—, cuya posición es siempre altísima, se le llenaron los ojos de lágrimas cuando vio el Collar de la Anunziata alrededor del cuello de Ribbentrop”.

Lo esencial del pacto está contenido en el artículo 3ro., que dice: "Si, contra los votos y esperanzas de las partes contratantes, una de ellas se viera arrastrada a complicaciones militares con otra potencia, u otras, la otra parte contratante intervendrá inmediatamente como aliada a su lado y la sostendrá con todas sus fuerzas militares, por tierra, mar y aire". En la eventualidad dé un conflicto armado, el artículo Sto. prohibe a las dos potencias concluir un armisticio o una paz por separado. Hitler se encarga de añadir un preámbulo agresivo: "Las dos naciones, unidas por una profunda afinidad ideológica, están resueltas a actuar juntas y unir sus fuerzas para obtener el espacio vital que les es necesario". Con este pasaporte para la masacre europea, el 24 de mayo Hitler congrega, en secreto, a sus jefes militares. El tema de la reunión: la invasión de Polonia.4

En la Argentina, otros personajes van tomando ubicación en la escena. Por de pronto, el 25 de mayo un suelto de la revista Caras y Caretas, informa:

Héctor Pedro Blomberg Escribe para Evita Duarte

"Decir que Héctor Pedro Blomberg escribe para una obra radioteiefónica, significa que dicha compañía tendrá rotundo éxito con poco que ponga de su parte en la interpretación. Y si esa compañía va encabezada, como en este caso, por una figura joven, talentosa y tesonera, con mayor razón puede asegurarse el triunfo. A Evita Duarte le tocó en suerte hacerse cargo del personaje protagónico de Los jazmines de/80 que es la obra que comenzó a propalarse por el micrófono de Radio Prieto y que, como todas las de Blomberg, es de una delicada factura y de efectos seguros".5




Demás está decir que a finales de la década del 30 ya está afirmado el radioteatro. Buenos Aires, Rosario y otras ciudades viven con intensidad este nuevo mundo de distracción, generando hinchas de cada una de las emisoras más importantes —Belgrano, Splendid o El Mundo— como si fuesen equipos de fútbol. Por ahora, la voz de Eva Duarte no llega más que a zonas aledañas de Buenos Aires y se pierde en los caminos tortuosos del éter. Ya vendrá el tiempo en que anclará en alguna de las tres radioemisoras mencionadas, las que con potentes transmisores o redes de emisoras, cubren todo el territorio nacional.

Pero, veamos otros aspectos de la sociedad. Tres revistas dan la tónica del círculo frívolo, mundano y ocioso de la época:

"En ninguna casa de la clase alta y de la clase media en ascenso faltan El Hogar y Mundo Argentino de la Editorial Haynes, y la revista quincenal ilustrada Atlántida. La Revista El Hogar es sin lugar a dudas la más prestigiosa y fiel intérprete del "gran mundo social porteño", como acostumbra ella misma a denominarlo. Una forma de corroborar la frase es la queja impresa sobre la invasión del gringuerfo en Mar del Plata: "Los grupos fundadores —rezonga— se alelan hacia los hermosos campos del Golf Club, haciendo rancho aparte, lejos del ruido y quedando en calidad de huéspedes de su propia casa. Como una lámpara votiva, el Ocean Club es en plena rambla la única realidad de la antigua opulencia dominante—.




"La revista Atlántida, entre otras cosas, califica al baile como el primero de los deportes. "Nuestra época se llamará en la historia la Era del Baile, y el fox-trot no sólo forma parte de nuestras costumbres, sino que ha pasado a ser de nuestras más indispensables necesidades' Preocupada, en una encuesta consultaba a Marcos Victorica sobre la ligereza de las costumbres, y éste declaraba: "Evidentemente, el frotamiento social se ha acrecentado con los transatlánticos y con la radio telefeo n ía, repositorios de papanatas y nuevos ricos”.

"Otra nota de la misma revista indica de dónde proviene la filosofía de estos años: ". . .El cabaret artístico de Estados Unidos es Hollywood, la ciudad del cine, donde a la luz enceguecedora de potentes reflectores se fabrican kilómetros y kilómetros de films. . . ¡y el Paraíso moderno está en las usinas de Ford!", y agrega: ' . . Multiplicar cilindros en los motores, multiplicar los pisos en los edificios, multiplicark multiplicar/ producción, multiplicar las masas obreras... ¡Realizar!"

"No obstante la persecución a las organizaciones de los trabajadores durante el provisoriato de Uriburu y el gobierno de Justo, la evolución mundial producida en el campo laboral, tiene su repercusión en la Argentina. Merced a la tenacidad de un diputado socialista, Francisco Pérez Leirós, se ha logrado que el gobierno apruebe en 1932 el descanso obligatorio en la tarde del sábado y, para los obreros que trabajen por día, por semana o por mes, el derecho a cobrar el salario del sábado como un jornal íntegro. De 1934 data un período mínimo y continuado de descanso anual, denominado vacaciones pagas.

"Con las nuevas leyes sociales aplicadas a regañadientes aumenta, sin embargo, el tiempo libre para la mayor parte de la población trabajadora. Es cuando empiezan a proliferar los clubes de barrio y el fútbol pasa a ser profesional y se transforma en una importante actividad. A la sombra de las esquinas de Buenos Aires y de Rosario, crecen como hongos durante esos años, algo que se puede denominar como clubes sin sede. La esquina, que es la "parada" de la barra de muchachos del lugar, cumple una función social muy importante. Debajo de esa especie de marquesina que tienen algunas ochavas, se dirimen todas las cuestiones. En los días de lluvia, sin fútbo, el tema mujeres surge inevitable, entre la niebla tenue del agua. Cuando hace buen tiempo aparece el fútbol. Todos van a "jugar a la pelota" —como actores o espectadores— a los escenarios habituales: el potrero o la calle.

"Salvo las partes céntricas, los sábados por la tarde y los domingos por la mañana, vastas áreas ciudadanas son escenario de miles de partidos rabiosamente disputados. Cuando en la barra se va incrementando el promedio de edad, se intenta dar mayor organicidad a los afanes deportivos e, infaliblemente, se funda un club cuya sede es la esquina. Decidida la empresa, el método es rápido y sencillo, aunque no fácil, por la escasez de medios económicos: nombre, adquisición de las camisetas y de una pelota número cinco. Aparecen así los clubes fantasmas donde los detalles para encontrar a sus integrantes se escriben en las paredes esquineras, a veces cubriendo los muros del barrio con inscripciones como esta: "Sport/ng A thletic Club, Sta. y 6ta., desafío”.

—Por supuesto, algunos clubes que en su origen son similares al ejemplificado, seguirán distintas trayectorias. Bernardo Verbitsky,6 en Grandeza y decadencia del Estrella del Sur, narrará las andanzas de una barra esquinera, similar a todas las existentes, a la que se acerca un nuevo vecino que ostenta en la puerta de su recién habitada casa la dorada chapa de odontólgo.

"El recién -llegado conversa largamente con la muchachada sobre entidades deportivas juveniles que, según él, le hacían recordar a su propia adolescencia y los exhorta a dar forma real al club que ya existe en potencia, sugiriéndoles con modestia que se hará cargo de los gastos principales si la barra se decidiera a buscar un local para instalar la sede. Entusiasmados, los jóvenes son arrastrados por la quimera y, en un derroche de energías, trabajan al regreso de sus ocupaciones diarias y durante los fines de semana para transformar un vetusto salón en decorosa sede. En síntesis, se habrá de repetir la historia del entusiasmo desinteresado que sirve de peldaño para el profesional que, con su maniobra, hace cotizar en un comité político su condición de presidente del club del barrio. "Estrella del Sur, como otros clubes similares, vivirá flanqueado por fauces que lo acosarán hambrientas: la política venal y los descubridores de cracks de potrero para los nacientes equipos profesionales. Una dentellada tras otra lo irán destrozando paulatinamente.

"Algunas de esas asociaciones con más suerte, llegarán a poseer su sede sin pasar por la experiencia política. Generalmente, un grupo de antiguos vecinos, guiando a los más jóvenes, avanza paso a paso hasta alquilar una simple sala a la calle o, en el mejor de los casos, arrendar o comprar una vieja casa en la zona. A partir de ese nivel, se produce una diversificación: por un lado se convierte fundamentalmente en el club de fútbol o básquet del barrio y, por otro, pasa a ser el refugio o segundo hogar de muchos solitarios que al contar con mayor tiempo libré, encuentran en el club compañía.

"Por otra parte, la sede es el salón donde se hacen las fiestas de casamientos, se celebran - las festividades patrias y los agasajos que, por distintos motivos, dan lugar a alegres fiestas. Regularmente se organizan bailes cuyas recaudaciones constituyen la principal fuente de ingresos.

"Los tangos, milongas, valses, pasodobles y tarantelas, que gozan del favor del público, poco a poco lo van perdiendo. Es decir, se va dividiendo la cosa cuando el auditorio comienza a escuchar El Rag de la ca/le Doce, El paso del tigre, De buen humor, Rapsodia en azul, Sa/nt Louis Blue, Serenata a la luz de la luna. Las emisoras difunden discos de los famosas Artie Shaw, Benny Goodman, Count Bessie, Glenn Miller y Louis Armstrong, con los que compiten sus réplicas criollas Eduardo Arman¡, René Cáspita, Raúl Sánchez Reynoso, Barry Moral.

"Es el tiempo de los discos de veloz girar en las victrolas, ya acopladas a la parte superior de las radios quienes ofrecen "en cualquier momento la noticia imprevista". Y mientras se ve en las películas la otra cara del mundo, para porteños y rosarinos constituye toda un rito ir a pasear al centro los fines de semana. En Rosario, es la calle Córdoba destinataria de multitudes que lucen sus mejores rapas: las mujeres de riguroso sombrero —a veces con tul—, guantes hasta el media brazo y otras atav(os no menos singulares. Los hombres de traje con chaleco en invierno, sobretodo, corbata can el correspondiente alfiler, camisa con gemelos en las puños, sombrero y hasta bastón y chalina a bufanda de seda blanca.

La mismo que en Buenos Aires donde "desde todas los barrios, apretujada en el interior de cien tranvías orquestales —idealiza Leopoldo Marechal en Historia de la calle Corrientes— una multitud gritona y riente viaja rumbo a la noche, acariciando los más audaces devaneos. La noche está en la calle Corrientes. . . La calle las espera con sus teatros y cines abiertos, con sus cafés rutilantes, can el vértigo de sus luces y sonidos. Las reposados burgueses con sus familias asientan sus reales en las cinematógrafos de lujo, y no faltan las patotas de muchachos que recorren las calles sin rumbo fijo.

"Otras grupos de jóvenes se alinean en la calle Florida luciendo generalmente su único y bien cuidado traje dominguero, camisa almidonada, zapatas muy lustrosos y cabello peinado a la gomina, para ver desfilar y piropear a las mujeres porteñas. El aspecto compuesto de esos galanes callejeros inspira a Rodolfo M. Taboada una graciosa duda: "No se sabe si se planchan el traje can gamma a se peinan el cabello con una plancha".7

Las mujeres, con sus polleras cortanas, inspiran a su vez a Alberto Pidemunt, quien estampa en la sección de Caras y Caretas, "Poniéndole el cascabel al gato": "Ante la pollera, absorta / ninguna queda al mirarla /y en cuanto a corta llevarla /ninguna se queda corta. Pese a los gritos airados / de quien no quiere ver tanto / la mujer es un encanto / y nosotros... ¡encantados! Quien tanguea sin buen norte / trabazones no soporta, / pues es la pollera corta / lo más bueno para el corte. Sólo el barrendero aflora / la antigua moda, dé veras / y dama por las polleras / que hacían de barredoras" 8

NOTAS

1 Primera Plana. NO 326. Págs. 36/38. Bs. Aires. 25.3.1969.

2 Miguel de Molina, rep. cit.

3 Gori Muñoz, n. en Valencia en 1906. Hijo del pintor Gregorio Muñoz Dueñas, estudió las primeras disciplinas de pintura en la Escuela San Carlos de su ciudad natal, para ingresar más tarde en la Academia de San Fernando, en Madrid, y completar sus estudios superiores en Barcelona. Interesado en la escenografía, realizó complementariamente estudios de arquitectura. Fue becado para perfeccionarse en Francia, Bélgica y Holanda. Expuso en París con elogios de la crítica. Designado miembro de la Academia Nacional de Artes de España, en 1937 realizó la parte decorativa del Pabellón de España en la Exposicion Internacional de París. Ya en la Argentina, tomó parte activa en espectáculos y temporadas teatrales, iniciándose como escenográfo cinematográfico con la película Canción de Cuna.

Creó la escenografía funcional en nuestro cine, con una decoración múltiple ininterrumpida que permitía un mejor aprovechamiento para el manejo de cámaras y la iluminacion adecuada para cada escena. Escenografo permanente de los Estudios San Miguel, ganó siete premiosen la desaparecida Academia de Artes y Ciencias de la Argentina, así como un número mayor de distinciones conferidas por la Asociación de Cronistas de Cine de la Argentina, y premio especial del Primer Congreso Hispanoamericano de Cine, realizado en Madrid, en 1947. Afectado por el mal de Parkinson en la década del 60, Gori Muñoz siguió trabajando sobre su caballete hasta el último momento, siempre con una expresión de esperanza y optimismo pintada en su rostro. Falleció en Buenos Aires, el 22.8.1978.

4.Primera Plana, NO 334. Págs. 47/48. Bs. Aires. 20.5.1969.

5 Caras y Caretas. Año XLII. Bs. Aires. 25.5.1939.

6 Bernardo Verbitsky. Desde mucho antes de que en 1941 se le otorgara el primer premio "Ricardo Güiraldes" por suprimera novela Es difícil empezar a vivir, el nombre de Ricardo Verbitsky ya había trascendido los ámbitos literari9s y periodísticos, motivado por sus penetrantes e inteligentes artículos que publicaba en Noticias Grdficas, con el título de Los libros por dentro. Más tarde pasó a Crítica; luego publicó Significación de Stefan Zweig (1942); En esos años (1947); El Café de los Angelitos (1950), Esquinas y calles de tango (1956), Villa miseria también es América (1956), Un hombre de papel (1967), Cuatro historias de Buenos Aires (1971) y, entre otras novelas, Etiquetas a los hombres (1973), donde uno de los personajes sostiene una definición que actualizaba una vieja obsesión del autor: "Yo he defendido mi derecho a vivir como un ser humano, sin encasillarme como judío". Sus obras alcanzan a catorce novelas y mas de veinte títulos entre ensayos y poemas. Una obra unificada por una única preocupación: su convicción de que el hombre ha de sobrevivir a la mecanización, a la rutina, a la crueldad, a la desesperanza, y una fe inquebrantable en la fraternidad humana, en la amistad y en el amor familiar. Falleció en Buenos Aires, a los 72 años de edad, el 15.3.1979. Y. Clarín. 16.3.1979.

7 Oscar A. Troncoso. La Argentina de los años 30, en revista Panorama. Págs, 48/51. Bs. Aires. 26.1.197 1.

8 Caras y Caretas; Año XLII. N°2130. Bs. Aires. 5.8.1939.

Fuente: Extraído del Libro “ El Rosario de Satanas Tomo II . Editorial Fundación Ross.

martes, 12 de junio de 2018

DON NICOLA Y LOS PROFESORES

Por Héctor N. Zinni

Declina 1938. El 25 de octubre a las 7 y 30 de la mañana, una mujer se interna lentamente en las aguas de Mar del Plata hasta que desaparece: es Alfonsina Storni, cuya poesía, moderna y rigurosa, seguirá viva e influyente. En Alemania, el 9 de noviembre, sobreviene una ola de destrucción sin paralelos que no tarda en llamarse La Noche de Cristal.1 El 10 de noviembre muere el jefe de los turcos Mustafá Kemal Atartük. El hecho se registra en Estambul, durante el curso de un viaje a la ex capital imperial. Atartük es sepultado provisoriamente en el museo etnográfico de Ankara.
En Rosario se inaugura el Palacio de la Aduana el 24 de noviembre, con la asistencia del presidente de la Nación, doctor Roberto Ortiz, quien concurre al banquete —a cuyo fin se brinda un diner dannt— ofrecido por el gobernador Iriondo. Dada la importancia que va cobrando la urbe, en diciembre se traslada desde Paraná al Comando de la 3ra. Región Militar. Consecuentemente, el 10 de enero de 1939, queda constituido el Comando del Primer Cuerpo de Ejército.2
A partir de este año comienza en Rosario la instalación de escuelas industriales, que se multiplicarán con el correr de los años, enseñarán distintas especialidades y funcionarán bajo el rubro de Escuelas de Educación Técnica.3 Es el año en que habrá de inaugurarse la ruta Rosario Casilda, bajo la denominación de Jorge Raúl Rodríguez, y en el que el actor inglés Basil Rathbone iniciará una serie cinematográfica feliz: Sherlock Holmes, que concluirá en 1944 siempre con Nigel Bruce en el papel de Watson.4 En el transcurso de los meses que vendrán, los alemanes Otto Hahn y Fritz Strassman darán a conocer la teoría de la fisión del uranio, mientras es inminente el debut de un hijo de Congreve en Buenos Aires, de nombre Embrujo, que está afiliado al stud de Los Patrios, de Ernesto Pueyrredón y que será el gran crack de la temporada.5 También es inminente el comienzo del primer servicio transatlántico de pasajeros que la compañía Pan American Airways hará desde Nueva York a Southampton.
Por otra parte, la canción Detrás del Arco Iris,6 incluida en la película El mago de Oz, ganará el Oscar de la Academia de Hollywood, dentro de su categoría, mientras su intérprete, Judy Garland,7 recibirá también un Oscar como premio especial a su relevante personalidad juvenil, de la misma forma que en años anteriores lo han recibido Shirley Temple, Diana Durbin y Mickey Rooney.
En ese mes de enero, "una intensa ola de frío azota el Reich. La temperatura, que en Berlín llegó a descender hasta doce grados, en otros puntos, como por ejemplo Prusia Oriental, llegó hasta 20 grados bajo cero", el comentario, que es de la revista Patoruzú, agrega: "esperamos que los alemanes no acusen a los judíos de provocar el frío para hacer negocio con la venta de pieles.8
"No debe darse importancia al desenlace final de una vida, aún cuando sean otras las preocupaciones vulgares", escribe, el 5 de enero de 1939, Lisandro de la Torre, en carta de despedida a sus amigos. Pocas horas después, de un balazo se parte el corazón cerrando así el último capítulo de una vida desgarrada, símbolo, consecuencia, de una Argentina signada en los últimos años por suicidios de personajes célebres.
El ilustre desaparecido, cuyo cadáver yace en un pequeño departamento de la calle Esmeralda 22, en la Capital Federal, es el mismo que, cuando el célebre debate de las carnes, demostrara la ligazón entre Gran Bretaña y la clase dirigente de Buenos Aires. Es el mismo al que el joven nacionalismo, la futura intransigencia radical, los intelectuales y la naciente clase media le habían arrojado un postrer salvavidas ofreciéndole el liderazgo de la muchedumbre que, un lustro después, encontraría enel camino a Juan Perón.

Pero de la Torre ya no los escuchaba: "Entre los muchos errores que cometí, debo colocar el de haber aceptado la dirección de una fuerza política —escribía a Luciano Molinas horas antes de suicidarse—. Yo no era un hombre político, porque en ningún momento subordiné los procedimientos a las concesiones necesarias para llegar al poder. De ese modo fui conscientemente al aislamiento y a la anulación, seguido por ustedes' Como fuere, de la Torre asume en su muerte las culpas de la Argentina, en cierto modo, las suyas propias: el país le habría debido mucho más si el hubiera podido aceptar el destino que merecía. Descreído de las multitudes —pues no sintó en su corazón la emoción popular—, solitario entre las muchedumbres, luego del disparo mortal entraría su alma, silenciosamente, hacia ese mundo de sombras o de luces, según a esperanza de cada uno, donde Dios o sus dioses le estarían esperando para transitar con él las verdes praderas de la inmortalidad 9.
Violentos terremotos azotan Chile el 24 de enero, dejando un saldo de 10.000 muertos y 70.000 personas sin hogar. También queda destruida Chillán, ciudad que ya había sido devastada por un sismo en 1835. Muy lejos de allí, en Erzinjam —Turquía— hay otro temblor el mismo día que mata a 23.000 personas. Aparece un ciclón en Rosario el 3 de febrero. Pero, afortunadamente, no es de temer, ya que con ese nombre se funda el Ciclón Basketball Club quien de inmediato se aflija a la Federación Rosarina de Basket y consigue con el tiempo poseer local propio en el sector oeste de la Sección 18º.
"—Pero la mishiadura se hacía sentir. En aquella época yo trabajaba en la Unión Telefónica, que tenía los depósitos en la calle Mitre al 2700. Entre nosotros había una cantidad regular de sicilianos, que no sabían leer ni escribir. Un día aparece en el transparente una información y los gringos le pidieron a Lobera que leyera. El papel decía: "Por haber safocado un incendio, se asciende a fu/ano de tal de /8 categoría C a la O, con $ 50 mensuales". Cuando escucharon eso, los sicilianos empezaron a exclamar: ¡Chincuanta pesi! ¡Chincuanta pesi!' Lobera, que era un bandido, desapareció. El asunto es que en la punta de un galpón estaban los cinco sicilianos comentando en voz alta el aumento, y yo, leyendo una revista. De repente entra por la otra punta del galpón como un humito, y sL oye un grito lejano: 't . . iFueegoo!' Los gringos se levantaron y el más petiso entró a correr en punta diciendo: "¡¡E mmmío…!! ¡¡E mmío!!.Los otros gringos, iban detrás y el chiquito adelante siempre. Así, a la carrera, al dar la vuelta al galpón, se toparon con cinco baldes de agua que habían aparecido allí como por arte de magia. El petiso agarró de la manija al primero que encontró, pero a la carrera y sin detenerse. Los otros también. ¿Qué había pasado? Que este bromista de Lobera, había agarrado unas hojas del diario La Capital, las había hecho un bollo y prendido fuego con un fósforo. Llegó el siciliano que punteaba en ¡a corrida y zampó el balde allí. ¡Para qué! Salían más llamas. iiQuirosino!! / ¡Quirosinol!, gritaba. Es que, además. Lobera le había puesto kerosene a los baldes.
Pero, lo del transparente, ¿era cierto?
Tampoco. Había sido todo idea de Lobera para hacerse el plato con la gran mishiadura que había.
Le salió redondo.
Vea, yo no sé cuánto me queda de vida, pero lo que yo me he reído no me ¡o quita nadie".10
En medio de las estrecheces la gente ríe y entroniza a un prototipo: Don Nicola, un personaje creado por el dibujante Héctor L. Tormo que, desde 1937, viene aumentando el tiraje de la revista porteña Aquí está! La publicación realiza un concurso en el mes de febrero y el público responde enviando un aluvión de cartas. En el número correspondiente al 20 de febrero de 1939, se devela la incógnita que ha sido el nuevo motivo de dicho certamen, bajo estos titulares:
¡LO PROFESORE SON DO FONOMONOS! Declara Don Nicola después del experimento de la lluvia Historia de un invento, de un concurso y de un éxito que fueron /o que debieron ser porque nunca dejaron de ser
lo que habían sido.
El relato, que incluye una fotografía de Tormo con semblante abrumado ante el torrente de correspondencia, una viñeta con la vera efigie de Don Nicola y los dos profesores, así como la reproducción facsimilar de un documento oficial en el que se establece el día y la hora en que ha llovido por esos días sobre la Capital Federal, se desenvuelve dentro de los carriles de un humorismo fino y oportuno:
Extraordinario entusiasmo
"El país y sus alrededores han vivido durante estos dos últimos días una emoción extraordinaria. Después del fracaso de Baigorri Velar, que apagó tantas esperanzas agrícolas y ganaderas, que hizo sacar en vano a la intemperie las cubas de los vinateros Y los tarros de leche de los tamberos, ya se daba por definitivamente acabada la posibilidad de un aparato para hacer llover. Pero surgió una voz: —Nosotros, que somos lo que debemos ser, pero podríamos haber sido diez veces más de lo que somos, silos que no fueran mucho menos de /o que parecen ser, hemos inventado un aparato que, ese sí, hará llover lo que debía haber llovido si el que quiso hacer llover hubiera podido hacer llover lo que esperaban que lloviera.
¡Lo pro fosore! . . . ¡Lo pro fosore han inventado l'aparato para hacerte caere lo choporrone!. . . - gritó, al escuchar aquello, don Nicola, con extraordinario entusiasmo, dando el grito en el conventillo de nuestra historieta.
Gritar en el conventillo es difundirlo por el altoparlante de las vecinas a todo el barrio. El barrio se lo cuenta a la ciudad. La ciudad al país. El país al mundo. Y así supo todo el mundo que los profesores, creados por la imaginación de nuestro dibujante Héctor L. Tormo, habían realizado el milagro que el ingeniero del enchufe no había podido llevar a cabo: ¡la máquina para hacer llover!
Un reto al mundo
"Pero nunca faltan espíritus descreídos o malintencionados que echan sombras sobre los más preclaros talentos. Lo mismo que dijo el mundo de Einstein, de Galileo, de Marconi y del doctor Giacobini, dijo también de los profesores: "-- ¡Son unos macaneadores!"—. Y el mundo se lo dijo al país, el país a la ciudad, la ciudad al barrio, el barrio al conventillo y el conventillo a don Nicola.
Enterado nuestro ilustre tano de aquella terrible injusticia que pesaba sobre el prestigio de sus dos hijos predilectos, los llamó una noche a su pieza de encargado, les sirvió de su vino favorito y les dijo:
- -Mochachos: ¿Ostede se han enterado de lo romore cerco/ante que cerco/a sobre lo asunto de lo aparato que te manda la yuvia de agua?
--No nos hemos enterado, pero nos podríamos haber enterado si hubiéramos querido enterarnos antes de que se enteraran los que no debieron enterarse.
••-Boeno. De todo modo, tenemo que salvare lo prestiquio de lo conventiyo, de lo pro fosore, de don Nicola e de lo aparato para hacerte abrire lo paragua. ¡Semo lo tre mosco tero: todo para uno e uno para todo! Vamo a lanzare lo reto a lo encrédolo. Vamo a pedire que te mándeno a decire lo día que quiere que llueva, e te le hacemo yovere. ¡Ya va a sapere lo mondo falace e descreído lo que sorno capace nosotros e qué sé yo!
Lluvia de cupones
"Así, esa noche con vino y misterio, surgió la idea del concurso. Tormo recogió la sugestión, la llevó al director y el director la llevó a la revista, la revista la llevó al taller, el taller la llevó al canillita y el canillita la llevó al lector. Y el lector empezó a mandar cupones. Estaban en juego treinta y tres premios: un traje para hombre de la Casa Muñoz, un impermeable, un paraguas de fina seda y treinta originales de la historieta dedicados y firmados por su autor...
Fueron largos días de expectación. Los profesores dieron un plazo: entre el 15 de febrero y el 15 de marzo. Mientras los lectores votaban desesperadamente, los dos sabios aceitaban su complicado engranaje, probaban el pedal, observaban en la bóveda celeste las reacciones atmosféricas y sentían cada vez más confianza en sus medios. Las multitudes vivían pendientes de la nueva creación del talento científico de los dos colosos. Comenzó la lluvia. . ., pero era la lluvia de cupones; porque la otra estaba contenida por los sabios hasta el momento oportuno.
14 de febrero de 1939. Día histórico si los hay. La humanidad estaba con los ojos puestos en el cielo. Las nubes comenzaban a hacer sus dibujos amenazadores.
Y el aparato funcionaba incesante. Los profesores se reemplazaban mutuamente en el pedal. Taca-taca, taca-taca, taca-taca.
¡En ese ruido palpitaba la esperanza de la humanidad, latía él corazón del mundo!
Héroes de la humanidad
"Tan, tan, tan. ¡Las 24 del día 14, la hora O del día 15, la fecha reservada para el milagro!
Crecía la expectación, crecía la emoción. La máquina seguía su ruido monótono. Don Nicola, nervioso, se arrancaba los pelos del bigote. Paseándose inquieto ante la puerta de la pieza donde los profesores actuaban, echaba miradas angustiosas'. Pareciera que cuando alguien apareciera por ella iba a preguntar: “ E varoncito?'
Así pasaron diez horas. Las nubes seguían amontonándose. Dieron las diez. Las diez y un minuto. Las diez y dos minutos. Las diez y tres minutos. Las diez y cuatro minutos. ¡Las diez y cinco minutos! (menos mal que no fue a las diez y cincuenta y nueve).
A las diez horas y cinco minutos del día 15 de febrero comenzó la precipitación pluvial sobre la Capital—, afirma un certificado expedido por la Dirección General de Meteorología a nuestra solicitud. ¡Este es el éxito definitivo, la consagración de los profesores, de su manager don Nicola y de su secretario Sansón! ¡Esto es asegurarle a la humanidad una vejez descansada y feliz!
¿Qué más podemos decir?. En este momento, nada. La emoción nos ahoga. La lluvia también. ¡Pensar que estos dos beneméritos sabios han realizado lo que el ingeniero no pudo lograr, con todo el apoyo del periodismo y del gobierno de Santiago del Estero! ¡Y pensar que lo han hecho con un aparato a pedal, sin gastar corriente de la C.A.D.E., ni nafta de Y.P.F."11.
Llegado el concurso a su término, se computa la llegada de 37.480 cupones, sorteándose premios entre los que han acertado el día, el mes y la hora de la precipitación pluvial. Los ganadores son muchos, entre ellos reciben un cartón original de la historieta algunos rosarinos, ellos son: Armando M. Tuzano, con domicilio en bulevar Alberdi 699 Esteban Gorziglia, domiciliado en calle Catamarca 2326; Leonor Lambrisca, Mitre 2126; Luis de Marco, Mendoza 6176, y Ricardo M. Comparetto, Sarmiento 2514.
Aquí Está!, la popular revista porteña que es dirigida por don Ramón Sopena y tiene como subdirector a Manuel M. Alba, ha sacado carta de ciudadanía en Rosario donde se vende a rabiar.. Las razones de su arraigo son varias, entre ellas la publicación en folletín de la obra de Manuel Gálvez Vida de Hipólito Irigoyen, subtitulada El hombre del misterio. Se eleva el tiraje y, en medio del éxito rotundo aparece la obra, el 14 de abril, con formato de libro.
El trabajo disgusta a los irigoyenistas y a los antiirigoyenistas, lo que significa un verdadero triunfo en las ventas. El diario La Prensa, no obstante ser un órgano enemigo de Irigoyen, apunta: "El libro no tiene finalidad política alguna y es objetivo e imparcial en la presentación de los hechos; su visión de/personaje es altamente emotiva y predomina por sobre todos los intereses la complacencia estética del autor que se regocija de haber encontrado en Ir/go yen todo lo que como novelista le ha atraído siempre: las multitudes, lo pintoresco, lo tumultuoso, lo humano, lo argentino..."
NOTAS
1- “Para los judíos de Alemania fue una noche de desesperación, con la policía limitándose a hacer de testigo ante las destrucciones y las palizas. Según datos oficiales fueron destruidos 814 comercios y 171 hogares, e incendiadas 191 sinagogas, 36 judíos fueron muertos y otros 36 gravemente heridos. Los destrozos, saqueos e incendios comenzaron sistemáticamente en horas de la madrugada y se prolongaron todo el día. Multitudes enormes pero silenciosas presenciaban todo y la policía se limitó a dirigir el tránsito y arrestar judíos en masa para su protección. Las reacciones en el exterior fueron inmediatas y los actos de brutalidad recibieron un nombre memorable, inspirado en la cantidad de ventanas y escaparates destrozados: Noche de Cristal". John Toland, op. cit. Tomo II. Págs. 12/19.
2- Pasó a denominarse Comando II Cuerpo de Ejército al fusionarse con la 3ra. Región Militar, el 1.1.1961. De Marco-Ensink, op. cit. Pág. 337.
3- De-Marco-Ensink, op. cit. Pág. 376.
4- Basil Rathbone, n. el 15.6.1892 en Johannesburgo. Comenzó su carrera como actor de teatro en 1911, interpretando el papel de Hortensio en La fierecilla domada. A lo largo de una extensa labor escénica trabajo en una numerosa serie de obras de Shakesperare, en muchas de las cuales, como le ocurrió, por ejemplo, con Romeo y Julieta, fue animando casi todos los personajes masculinos. Sin embargo, fue el cine quien le dió amplia popularidad, aunque la manía del encasillamiento hizo de Basil Rathbone el candidato para los "malvados".
Su primera película fue norteamericana, se rodó en 1925 y se titulaba La novia enmascarada. Una parte, nada más. de los filmes en que intervino, da buena idea de esa diversidad tan extrema de niveles artísticos en que, cinematográficamente, tuvo que actuar: Los últimos días de Pompeya, Romeo y Julieta, Ana Karenina, Si yo fuera rey, El capitán Blood, David Cooperfield, La torre de Londres, El hijo de Frankestein, Historia de dos ciudades, Las Aventuras de Robin Hood, La marca del Zorro, El gato negro, El Jardín de Alá, Las aventuras de Marco Polo, Los tres mosqueteros. La espada mágica, No somos ángeles, etc. El actor Vincent Price reconoció en Basil Rathbone a su maestro quien, en agosto de 1964, a los 72 años de edad, vino a Buenos Aires para presentarse en el teatro Coliseo con dos funciones de abono en un espectáculo unipersonal basado en personajes de Shakespeare. De Rathbone, dijo el diario La Razón en aquella óportunidad: "Si tenemos en cuenta que ocupa el escenario por más de dos horas, durante las cuales desfilan a través suyo una docena de personajes particularmente complicados de Shakesperare --hombres y mujeres— y que Basil Rathbone tiene actualmente más de setenta años, es forzoso llegar a la conclusión de que el espectáculo que este fino actor británico presentó en el Coliseo constituye algo más que un virtuosismo: es una proeza". Rathbone falleció en Nueva York de un ataque al corazón el 21.7.1967. El público, que sólo lo conoció a través de la pantalla, sabía que era un gran actor, pero no tuvo sin duda cabal idea de cuánta era, en verdad, su valía. V. La Razón, agosto 1964. !a Capital. 22.7.1967.
5- Después de conquistarla triple corona con la dirección del jinete Eduardo Lema, se mancó durante el desarrollo del Carlos Pellegrini, montado por El Negro Acosta. Embrujo reapareció en 1941 corriendo el clasico Pueyrredón en San Isidro, donde marco un tiempo de 4'11" 2/5, récord para la distancia en esa pista que se mantiene hasta hoy, Abel González y Rubén Novello. Historia del Turf Pág. 109. Colecc. La Historia Popular. Centro Editor de América Latina. Bs. Aires. 1971.
6- Esta canción, cuyo título en inglés es Over the rainbow, fue escrita por el celebrado autor de jazz E. Y. Yip Hanburg, quien además, escribió la letra de incon- - tables canciones que se convirtieron en clásicos como Abril en París, Es sólo una luna de papel, ¿Qué hay, para decir?, Me gustan tus gustos, ¿cómo están las,- cosas en Glocca Morra' , y letras para comedias musicales, como Las Follies de Ziegfeld de 1934, Cabina en el cielo y El Mago de O:. Falleció a los 82 años en Hollywood, el z,31981. como consecuencia de un accidente automovilístico mientras conducía su coche por el conocido Sunsct Boulevard. La Razón. 5.3. 1981.
7- Judy Garland. En 1937 fue descubierta por la Metro Goldyn Mayes y colocada en una docena de comedias juveniles y musicales, en frecuente pareja con Mickey Roodey. Menos muñeca que Shirley Temple, mas vivaz como actriz que su contemporánea Diana Durbin, impresionó allí como un hallazgo de niña prodigio, capaz de cantar con entusiasmo sin perder el humor ni acceder a la sentimentalina. Después de E7 Mago de Oz, donde hace célebre la canción Detrás del Arco Iris --que se haría frecuente en su repertorio—, aparecieron otras comedias.
Bailando junto a Fred Astaire y Gene Kelly, pasó de niña a dama joven. Ganó en peso, atravesó dos casamientos, un intento de suicidio, conflictos con la Metro y el término del contrato. En 1951 pudo sentirse fracasada, pero su tercer esposo, Sid Luft, junto con la Warner Bross, se combinaron para que Judy protagonizara una secunda versión de Nace una estrella, que obtuvo un éxito fuera de lo común. En los catorce años posteriores, mientras aceptó 'en cine otros papeles menos ajustados a su personalidad, Judy Garland conmovió a los publicas de una equívoca manera.
Contratos incumplidos, demoras en las presentaciones, incidentes de alcohol y de drogas, enfáticas declaraciones sobre el hallazgo de la felicidad, documentaron indirectamente una decadencia personal. Como Marilyn Monroe, Judy Garlan no supo vivir al nivel de su fama ni mantener en la vida privada el equilibrio que habría hecho perdurar sus poderosas condiciones artisticas, sin hundirlas bajo la cirrosis. Cuando falleció, en la última semana del mes de julio de 1969, los médicos declararon que sus últimos tres años fueron sobrevividos por un milagro de la naturaleza.
8- Patoruzú. 2.1.1939. Pág. 26. Bs. Aires. Año II. N°68.
9- Lisandro de la Torre, n. en Rosario el 5.12.1868 y f. en Buenos Aires el 5.1. 1939. Recibióse de abogado en1888. Inicióse en el Partido Radical y actué en las revoluciones del 90 y 93, siguiendo la línea de Alem y Del Valle. Se retiro del radicalismo en 1897 dando a conocer una carta de gran resonancia que determinó su duelo con Hipólito Irigoyen, Indalecio Gómez, Mariano Demaría y otros, creó el Partido Demócrata Progresista del que fue jefe hasta su muerte. Aliadófilo en la Gran Guerra, de la Torre saludó el advenimiento de la Revolución Rusa en 1917; no se pronunció a su favor, pero la caracterizó de "fenómeno digno de estudio". Posteriormente critico "la falta de libertad en los países socialistas". Con el socialismo se volvió a encontrar en el curso de su carrera política. En 1932 fue candidato presidencial de la alianza demócrata-socialista, con Nicolás Repetto como compañero de fórmula.
Ocupó bancas en el Congreso Nacional. En 1912 en la Cámara de Diputados, y en 1934 en el Senado, por cuya actuación fue llamado “El Fiscal de la Patria" V. Raúl Larra. Lisandro de la Torre. Vida y drama del solitario de Pinas. Ed. Futuro. Bs. As. 1948. Rey. Panorama, 26.11.1968. Pág. 14 y Rev. Primera Plana N° 310. 3.12.1968. Ver, además, José Rafael López Rosas. Lisandro de la Torre: el solitario de las multitudes. La Capital. 5.1.198 1.
10- Testimonio de Francisco Donato tomado por el autor el 4.3.1981.
11- Aquí Está! Año IV. N°288. Bs. As. 20.2.1939.
Fuente: Extraído del Libro “ El Rosario de Satanas Tomo II . Editorial Fundación Ross.