La existencia de importantes
teatros como La Comedia, el Colón, verdadera meca del arte lírico y fiel exponente de
una digna arquitectura; La Opera, cuyo magnífico edificio fue y es centro (ahora como
El Círculo), de una
actividad multifacética, enfatizó el gusto de los rosarinos por las diferentes
expresiones de la música. Así, aparte de constituirse en escenario donde
actuaron las primeras figuras del mundo que, en sus giras por un país rico y
pujante como era entonces la Argentina, tenían como punto obligado a Rosario,
representaron un estímulo indirecto al quehacer de entidades forma-doras de
artistas, conjuntos musicales y corales de vasta proyección. Hacia fines del
período que tratamos se inició la labor de los teatros independientes, que
tanta difusión alcanzarían luego.
A la nómina de salas importantes,
corresponde agregar, en 1927, el Teatro Odeón, que ahora es sede de la Fundación
Astengo y brinda constantemente espectáculos de alta jerarquía.
En cuanto al periodismo, además del antiguo y
prestigioso diario La Capital, aparecieron gran cantidad de diarios y revistas,
entre los que cabe citar, por la prolongada influencia que ejercieron, a Crónica (1914-1976); La Acción (1918-1957) y La Tribuna (1928-1982).
Fuente:
Extraído de Libro “ Rosario desde sus orígenes hasta nuestros días” Síntesis
Histórica. Editorial Librería API 2º Edición. Rosario 1984.