El actual club Argentino tuvo a lo largo de su rica historia tres
estadios ubicados en distintos barrios de la ciudad de Rosario, a continuación
haremos un repaso de cada de uno de
ellos.
Por
Leonardo Volpe (*i),
Cristian Volpe (*2) y
Soccorso Volpe (*3)
La primera en Refinería
El
primer campo de deportes del entonces Embarcaderos Córdoba y Rosario (luego
Nacional y hoy Argentino) se ubicó en el barrio Refinería, más exactamente en
las intersecciones del bulevar Avellaneda y Gorriti. En ese reducto comenzó de
gran manera su participación en el certamen de primera división de la
Federación Rosarina de Football, al golear el domingo 11 de mayo de 1913 a
Brown de Santa Fe por 3 a 0, con tantos de Manuel Antuña, Callegaris en contra
y Ennis Hayes. La histórica formación salaíta que jugó su primer partido
oficial en un campeonato rosarino fue con Dionisio Flores; Ernesto Marconi y
Eugenio Bonmargini; Bautista Trossero, Victorino Revilla y Juan Aragüez;
Antonio Olmos, Julio Conde, Juan Molina Manuel Antuña y Ennis Hayes. Luego de
la disolución de la Federación, en 1914 Embarcaderos se afilió a la Liga
Rosarina de Football, donde actuó como local en ese field, en el cual se
mantuvo hasta mediados de la década del 20, cuando se mudó hacia otra zona de
la urbe rosarina.
La cancha del barrio Industrial
Posteriormente el club
Nacional (denominación que adquirió en 1915y Cambió en 1935 por su actual
nombre de Argentino) se trasladó entre las calles Gorriti e Iguazú, en pleno
barrio Industrial. En un principio la cancha poseía una modesta casilla de
madera, un alambrado, donde se colocaban lonas para evitar que se vean los
partidos desde afuera y unos pocos tablones, que se asemejaban a una tribuna.
Luego el reducto contaba con una humilde tribuna construida en uno de sus
laterales, más tarde se amplió la capacidad del estadio y se levantó una grada
de tablones de madera en el lateral opuesto a la tribuna que ya se encontraba.
Asimismo, es importante remarcar que por algunos años fue vecino del club Tiro
Federal, que tuvo su cancha en el terreno lindero a la del salaíto.
Allí
permaneció hasta el año 1943, cuando el club decidió inscribirse en la
Asociación del Fútbol Argentino, como ya lo habían hecho Newell's, Rosario
Central y Central Córdoba. Pero la afiliación no le fue aceptada, puesto que el
estadio con que contaba no reunía las condiciones adecuadas que requería la
A.F.A. Por tal motivo era necesario efectuar nuevas remodelaciones en su vieja
cancha de barrio Industrial. La comisión directiva quiso comprar un lote
lindero donde se encontraba una casa para poder construir otra tribuna. El
dueño del inmueble, que cuentan era el lechero del barrio, se negó a vender su vivienda, por lo tanto
el salaíto tuvo que buscar otro lugar para erigir su estadio.
El Olaeta
Fue
así que en 1944 se asentó en el denominado barrio Sarmiento, gracias al aporte
de José Martín Olaeta, presidente del club por ese entonces, que compró un terreno
en Roma (actualmente Víctor Mercante) y avenida Sorrento. Allí con esfuerzo y
dedicación se construyó el estadio que ahora lleva el nombre de quien fuera el
propulsor para que la obra se pueda llevar a cabo. Años más tarde la familia de
Olaeta cedió al club los terrenos que eran de su propiedad.
Debut en barrio Sarmiento
El
primer partido oficial que disputó en su nueva cancha se produjo
el miércoles 15 de abril de 1944 ante All Boys, con quien igualó 2 a 2 por el campeonato
de la Segunda División de Ascenso. Previamente al encuentro se efectuó la breve
ceremonia e inauguración del nuevo reducto, en la cual se intercambian flores entre los capitanes
de ambos conjuntos, asimismo ;
dirigentes del tipo de Floresta le regaron una planta recordatoria a
pares rosarinos. puntapié inicial la confrontación estuvo a cargo de presidente
honorario de la entidad salaíta, José Martín Olaeta. Tras un clima cordialidad
comenzó el partido, que contrariamente a lo que se esperaba, fue jugado con
suma brusquedad por sus protagonistas. Tan es así que producto de las reiteradas
infracciones tuvo que dejar el campo de juego en el segundo tiempo el
futbolista local Dioses. En los primeros minutos del encuentro, Argentino tomó
la iniciativa del juego, señalando el primer tanto por intermedio de Atilio
Trinchieri. Luego a pesar de las varias chances que tuvo el cuadro anfitrión
para estirar su ventaja, la visita llegó a la igualdad mediante un gol de tiro
libre anotado por Campos. Sin embargo, los dueños de casa lograron reponerse y
convirtieron una nueva conquista, gracias a un remate de Mario Casagrande, que
quebró la resistencia del guardameta porteño. En el complemento el delantero
Rodríguez de All Boys aprovechó una salida en falso del jugador se encontraba
en posición adelantada, que el arbitro no observó, dando por válido el tanto.
Una total injusticia, puesto que Argentino había desplegado un mejor fútbol que
su oponente y además dispuso de más ocasiones para poder quedarse con el triunfo.
Más allá del resultado, que fue anecdótico, desde ese día Argentino encontró su
lugar en la ciudad de Rosario, puesto que se quedó allí para siempre.
Hoy
el estadio José Martín Olaeta cuenta con una capacidad para albergar doce mil
espectadores y es motivo de orgullo para todos los hinchas salaítos.
Marcha de Argentino
Salud, viejo Embarcadero
Fuiste luego Nacional
actualmente mi Argentino,
pero siempre Salaíto
del principio hasta al final.
La tribuna que te alienta
día a día sin cesar
en espera de tu ascenso
¡Vamos viejo Nacional!
No te quedes que ganamos
Salaíto hasta al final,
te acompaña permanente
el aliento de tu hinchada
que no olvida
el valor de tu historial.
Te expresamos con anhelo
esta marcha que cantamos
con sinceros sentimientos
se haga carne entre la gente
de nuestro Barrio Sarmiento
Vamos, vamos Salaíto
vamos, vamos a ganar
Por el viejo Embarcadero,
Argentino y Nacional
Y en la buenas y en las malas
Salaíto, Salaíto hasta el final.
Salud, viejo Embarcadero
Fuiste luego Nacional
actualmente mi Argentino,
pero siempre Salaíto
del principio hasta al final.
La tribuna que te alienta
día a día sin cesar
en espera de tu ascenso
¡Vamos viejo Nacional!
No te quedes que ganamos
Salaíto hasta al final,
te acompaña permanente
el aliento de tu hinchada
que no olvida
el valor de tu historial.
Te expresamos con anhelo
esta marcha que cantamos
con sinceros sentimientos
se haga carne entre la gente
de nuestro Barrio Sarmiento
Vamos, vamos Salaíto
vamos, vamos a ganar
Por el viejo Embarcadero,
Argentino y Nacional
Y en la buenas y en las malas
Salaíto, Salaíto hasta el final.
Bibliografía:
“Puntapié
Penal “ ( Juan Dellacasa-h- 1938).
“Anales
del Fútbol Rosarino”( Cipriano Roldán – 1959)
Diario ”La Capital” del 12 de Mayo de 1913 y del 16
de abril de 1944.
(*1) Periodista deportivo
(*2) Diseñador gráfico (*3) Licenciado en antropología
Consultas en Internet:
leovolpe81@yahoo. conuar
Espacio dedicado a la Historia del Fútbol
Rosarino:
http://histofutbolrosarino.blogspot.com
Fuente:
extraído de la revista “Rosario, su Historia y Región. Fascículo N• 100 de Setiembre
de 1911