Por Wladimir Mikielivich
Ombú de las Animas llamándose al muy frondoso que hasta diciembre de 1902 existió en la acera norte de la calle Rioja entre las de Italia y Borrego, aislado ejemplar que fue motivo de inagotables leyendas y consejeras populares. En el período de convulsiones registradas en las décadas sexta y septima del siglo XIX, a su sombra se ejecutaban condenados a muerte, por lo que recibió dicha denominación. Fue derribado por órden municipal para facilitar el tránsito por la vereda, hasta entonces obstruída por sus enormes raíces.
Fuente: Bibliografía extraida de la publicación de la “Revista de Historia de Rosario Año X Nº 23-24 de 1972