viernes, 2 de septiembre de 2016

Concentración

Por Jorge Brisaboa

Con el profesionalismo —y las malas actuaciones del equipo— surgieron las o] gaciones para los jugadores. Los dirigentes elaboraron un reglamento. Corría l9 Debían entrenar dos veces por semana con buen o mal tiempo.

Debían concentrarse en vísperas de partidos de importancia.

Debían presentarse a dormir en el estadio (donde había quince camas) los miér les, jueves y viernes alas 21.30.

Debían permanecer los sábados a la espera del partido del domingo.

Debían quedar bajo el control del mayordomo del estadio que cumplía órdenes la comisión directiva.

Debían salir a almorzar y a cenar —mientras estaban concentrados— acompaña de un miembro de la comisión directiva.

Debían pagar multas si violaban estas normas.

Con el profesionalismo los jugadores comenzaron a conjugar el verbo deber. Lametamente ellos, que hacían del futbol una transgresión.

Fuente: Artículo Publicado en el libro “ De Rosario y de Central , Autor: Jorge Brisaboa Impreso en Noviembre 1996 por la Editorial Homo Sapiens.