Otro de los inmigrantes italianos
llegados a esta región fue don Juan Paladini en 1923 y se instaló en el barrio
Villa Diego sobre la ex Ruta 9 (hoy 21), donde comienza a elaborar una línea de
fiambres y embutidos que revivían las exquisitas costumbres alimentarias de la
vieja Italia. Trabajó junto a su esposa, María Davalle y durante 15 años la
pequeña empresa crecía al igual que el pueblo que le diera cabida. En 1938
fallece don Juan y la viuda con sus 4 hijos Rodolfo, Juan, Tilo y Roberto)
continúan con el emprendimiento con esfuerzo, sacrificio y unión por el camino
de la consolidación y el crecimiento sostenido. Durante los años sucesivos, los
fiambres y embutidos Paladini transformaron en una imagen familiar, sinónimo de
calidad y confianza.
En 1962 comienza a
construirse la nueva planta fabril, en un predio adquirido en nuestra ciudad, vecino a lo que fuera el Matadero Municipal sobre ie José Piazza y que luego se ampliaría hasta llegar a la actual extensión de 43.000 m2. En 1969
adquiere el primer campo con miras a lograr la integración agroindustrial y
hacia fines de la década de 1980 concreta una importante iniciativa comercial,
tendiente a consolidarse definitivamente entre las grandes marcas argentinas al
abrir su Centro de Distribución propio en Buenos Aires, primero de una cadena
que hoy cubre todo el territorio nacional con 10 sucursales. Con la
incorporación del frigorífico Fela, se
amplía la superficie de trabajo y la gama de productos. Más además se adquiere
lo que fuera el frigorífico Villa Diego transformándolo planta modelo para la
exportación de carne vacuna, habilitado a todos mercados. En 1989 se concreta la Planta de Tratamiento de Efluentes, que, junto con las lagunas artificiales, constituyen una acabada muestra preocupación por
la preservación del Medio Ambiente.
Con aproximadamente 10.000 madres es uno
de los productores de cerdos más importantes de Argentina ya que al criadero
de Villa Amelia (Santa Fe) se suma el de La Toma (San Luis), asegurando así la provisión de
materia prima de primera calidad, mediante cuantiosas inversiones en tecnología
reproductiva, instalaciones y el abastecimiento de alimentos balanceados con
granos de siembra y cosecha propios.
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Se ha transformado en una de las empresas
con tecnología más avanzada en el país, la certificación ISO 9000 en el año 2000, ISO 14000 en 2005, y el Certificado de Aptitud Ambiental de la Provincia de Santa Fe, otorgado por primera vez a
una empresa del rubro en 2008, van en esa dirección.
Actualidad
Hoy Paladini, a 85 años
después con más de 1800 empleados, 2 criaderos propios, 10 sucursales y 60.000
TN de producción anual, continúa al frente de las preferencias de los
argentinos, siendo una de las marcas más admiradas y entre las 20
con
mejor imagen de responsabilidad
social empresaria.
Fuente: Extraído de la revista de La Capital del Bicentenario
en 2010.