Por Andrés Bossio
Cuando falleció la entonces esposa del presidente de la Nación, Eva Duarte de Perón, las entidades vinculadas con el deporte se adhirieron al duelo de distintas maneras. En todo el país, la práctica del deporte había recibido un impulso extraordinario y está registrado en esta historia centralista cómo un préstamo oficial del Gobierno peronista posibilitó la modernización del estadio y otra serie de obras.
Por eso los clubes no permanecieron indiferentes ante el duelo nacional provocado por la muerte de Evita. La CD de Rosario Central, en sesión especial celebrada ese mismo día del 26 de julio de 1952, emitió' un extenso documento de adhesión a la congoja pública, remitió notas de circunstancias al presidente Juan Domingo Perón y adoptó esta original disposición que copiamos textualmente: ........1': Disponer la distribución de 200 ejemplares de La razón de mi Vida", en la forma en que mejor lo crea oportuno la Mesa Directiva a fin de que este homenaje póstumo se manifieste en todo su significado, pero desde ya dejando establecido que debe dedicarse un ejemplar a cada uno de los jugadores de la institución, cualquiera sea la división en que milite, como así también a cada uno de los atletas de las distintas ramas del deporte”.
Apuntamos otro dato que versa sobre las relaciones entre el peronismo y Rosario Central: tras recibir el presidente Perón a los jugadores campeones del '73 en Olivos, una inundación asoló por entonces a Santiago del Estero. El ofrecimiento de Vesco poniendo el equipo a disposición de la Presidencia de la Nación para ayudar a reconstruir la provincia santiagueña fue conceptuosamente respondido por Perón. Encuentra, como vemos, corroboración con algún dato de la realidad, un grito que repite frecuentemente la hinchada canalla: . . Central y Perón, un solo corazón - -
Fuente: Extraído de la Colección de Rosario Central. De Andrés Bossio