martes, 24 de abril de 2018

LA FUNCION DEL MAESTRO



La propia Olga explícito la función docente, en una confe­rencia dictada en el Museo Castagnino en 1941: "...con los compañeros de tarea he­mos llegado a común acuerdo y la práctica con sus resulta­dos, nos ha dado amplia apro­bación de que para llegar al alma del niño es necesario que el maestro modifique su imperativo pedagógico; es él, siem­pre él, quien imprime a la clase se artificiosidad, el que crea i ambiente frío, clima doctoral, tan opuesto al natural del ni­ño, emotivo, cálido, sincero siempre".

"Es el maestro, sobre el cual operan un sinnúmero de facto­res, primando la influencia deformadora de la escuela, y más tarde el cúmulo de exi­gencias, de programas, horarios, campanas suministra- das en dosis de minutos. Y por sobre todo esto, la ciencia pedagógica que en forma de preceptos, normas y principios j abstractos ha recibido. El I maestro, repetimos, es el que con su esterilizante indiferen­cia agosta la vida en flor del niño en la escuela".

"Y es el maestro a quien corresponde contrarrestar con inteligencia, sabio dis­cernimiento y un profundo amor, esa influencia que pesa sobre el niño con los fatales resultados, que de tan comu­nes, son apenas tenidos en cuenta por una minoría de maestros..."

Fuente: Extraído de la Revista “ Rosario Historias de aquí a la vuelta. Fascículo Nº 19. Autora. Amanda Paccotti de marzo 1992