miércoles, 23 de septiembre de 2015

EVOLUC IONES TENEBROSAS



"Nuestro país gozaba, hasta hace poco tiempo, del triste privilegio de ser uno de los mercados más atrayentes para la colocación de mujeres. Ahora, las cosas han cambiado, pero en esto, como en todo el comercio, ha seguido una evolución muy conocida: la industria nacional ha ido re­duciendo la introducción de mercadería extranjera. Se cuenta hoy con elemento propio; hasta el tenebroso extranjero ha tenido que aceptar la Intromisión del explotador nativo, el cual, incapaz de organizar la industria, solo se reduce a proporcionar mercadería o explotarla por su cuenta un forma clandestina y en menor escala.
Congreso, conferencias/leyes, ordenanzas; de todo sin embargo hemos tañido y tenemos en nuestra ciudad para localizar un tanto el fenómeno, caída dos manzanas cuenta con un lenocinio donde por lo general existe Una mujer cautiva extranjera o argentina, sin contar la cantidad que al atardecer pone en circulación, por lo general menores.
Sólo en los casos en que una de esas mujeres, desafiando brutales do­minios o encierros absolutos, llega hasta la policía, ésta parece enterarse de lo que ocurre o se siente autorizada para intervenir. Se sabe, sin em­bargo, de la existencia de inspectores, pero todavía no se ha dado el caso  de que por parte de esos funcionarios se haya llegado a esclarecer o conocer una de esas miles de tragedias bárbaras que se producen en comercio de esclavas.
¿Qué es lo que ocurre?. ¿Es que estamos frente a maffias tan poderosas como  para que no haya autoridad capaz de poder con ellas?. ¿Por dónde y cómo entran al país esas miles de mujeres que no pueden ser una Inmigración deseable?. ¿Con qué curiosos documentos sus explotadores salvan las interdicciones a que deben estar sujetas?. ¿Quién se ocupa de las miles de jovencitas argentinas que, año por año, son sacrificadas al terrible e insaciable?. ¿Es que todo eso no es un lugar común para  los funcionarios policiales y para todo el mundo?.
¿Ese llamado desesperado que de cuando en cuando, a través de la crónica policial se advierte, no es lo bastante elocuente para afirmar que hay todos un mar de almas cautivas, bajo esos muros tan extrañamente insalvables de los lenocinios?. Si es verdad que la mayor parte de los delincuentes – se encuentran por miles y miles—, viven de la explotación de mujeres y que por lo general éstas viven sometidas por el terror, ¿cómo es posible que  por día aumente la industria tenebrosa?
¿ Es que el simple hecho del pago de una patente debe justificarse con
asegurarse una fuente de recursos a costa de la salud moral del país?. ¿Es posible que las famosas asociaciones internacionales hayan llegado a for­mar en el país sus escuadrones d« intermediarios para la explotación tam­bién del elemento nativo?.
Puédese convenir en que hay problemas de difícil solución, especial­mente en países como el nuestro, donde la inmigración de hombres de trabajo ha sido permitida en exceso, sin advertir otras complicaciones desgraciadas, provocando un desequilibrio que ahora se agrava con la re­ducción de matrimonios; pero es hora de atender el fenómeno ante el cual estamos".5
Con todo, no vaya a pensar el lector que La Reacción es indiferente a manifestaciones progresistas de otro tipo. No. Ahí está, para corroborar el aserto, el ejemplar del 3 de abril en el que se destaca el ensayo de una nueva juntadora de maíz y deschaladora que, puesta a funcionar en el campo que el señor Juan Fuentes ha cedido para la prueba (La Salada. Ferrocarril Central Córdoba, actual Belgrano), ha dado resultados positi­vos.
"El mecanismo que motiva esta crónica —dice La Reacción- se en­cuentra montado sobre dos ruedas de un metro y sesenta centímetros de alto. El ancho es de un metro y sesenta centímetros y el largo de siete metros. Funciona mediante un pequeño tractor Fordson que también la arrastra, conectado en la máquina por medio de un eje giratorio que ac­ciona con el concurso de engranajes. Cabe esperar —anhela el cronista—, que el tractor pueda moverse sin funcionar la máquina . . .". Dos graba­dos a tres y cuatro columnas muestran una vista de la juntadora y tam­bién la máquina en actividad, con el tractor. A un costado de la maquina­ria, su inventor, señor José Carbó.
No obstante, el 10 de abril encuéntranse motivos mas altisonantes pa­ra atraer la atención del público. Esta vez son las bondades de UNA BUENA RAZZIA POLICIAL
Y todo, ¿por qué?. Porque…

 Notas
5 La Reacción. No 2003, 27 de marzo 1927.
6     La Reacción. No 2006, 10 de abril 1927.

Fuente; Extraído de Libro “El Rosario de Satanas” Autor Héctor Nicolás Zinni. Tomo I Editorial Fundación Ross. 3ra. Edición 2000