viernes, 28 de agosto de 2015

Historia de un inmigrante libanes: Vida de Jorge Cura



Nuestro trabajo es una breve síntesis, parte de un proyecto de investigación más amplio. El mismo pretende reflejar a través de un ensayo biográfico, la construcción identitaria de la ciudad y las causas de su perfil progresista.
Jorge Cura, como tantos otros inmigrantes árabes, llegó a la Argentina y a la ciudad de Rosario buscando libertad y progreso. Forjó junto a su hermano José un impor­tante grupo comercial dedicado al acero, participó políticamente como concejal, cultivó la amistad, desarrolló la cultura local, colaboró junto a sus connacionales para obtener el Consulado Libanes en la ciudad de Rosario y se solidarizó silenciosamente con todo aquél que lo necesitara, especialmente familias de trabajadores de sus empresas o simplemente aquellos que se acercaran a su persona.
"Los hijos de la montaña"
Los hijos de la Montaña, como llaman a su Líbano amado, conocen la lucha por la libertad desde tempranas épocas de su historia. El Líbano es una región atravesada por Oriente y Occidente, los Montes lo cruzan y delimitan, frente al imponente Mar Mediterráneo Oriental. Perla de Oriente, bien amada por sus hijos y codiciada por los extranjeros. Al nacer Jorge, su país pertenecía al Imperio Otomano, estado multinacional dentro del cual convivieron durante quinientos años turcos, griegos, eslavos, árabes, armenios y otras minorías. Mientras la corte otomana será recordada como foco artístico hasta nuestros días, su esplendor contrastó con el despotismo de los sultanes. Para principios del siglo XX ya había comenzado la lenta disolución del imperio de la "Sublime Puerta". Los movimientos nacionalistas iniciaban una situación de guerra y conflicto, haciendo de la zona un lugar de expulsión. La persecución étnica y religiosa fue la causa principal de que miles de hombres y mujeres huyeran en busca de un destino más promisorio. Contrastando esta realidad, la Argentina era un país próspero que ofrecía a los recién llegados trabajo, libertad de culto y un porvenir para sus hijos.
La infancia y su familia
Jorge Cura nació en el Líbano el 4 de Agosto de 1898 en el poblado de Net, donde fue bautizado bajo el rito católico maronita. Ingresó a la República Argentina junto a sus padres asentándose en la ciudad de Rosario a los 4 años. Del matrimo­nio Cura nació el 27 de Marzo de 1902 José Carlos, en la ciudad de Rosario, quien fuera inseparable compañero de ruta de Jorge. En Enero de 1904, murió en Rosario su padre, Jorge Carlos Cura, agricultor-campesino libanes oriundo de Net, a los 33 años, a las vísperas del nacimiento de la tercera hija del matrimonio, Rosa Cura. Su madre, Teresa Bouchacour Saade, joven libanesa de Ejden, llegó al país junto a su esposo a los catorce años de edad. Jorge tenía casi 5 años cuando junto a su hermano iniciaron el camino del trabajo y el progreso. Vivían en una casa de inquilinato en calle Italia 975.
Trabajó como lustrabotas para colaborar con su madre, quien realizaba tareas de lavandera y planchadora. Doña Teresa no hablaba el idioma castellano, fue aprendiéndolo paulatinamente. Falleció por los años 60 en la ciudad de Rosario.
Los árabes eran mal vistos social-mente puesto que no comprendían su lengua, ni sus modos culturales eran catalogados como gritones, peleadores, "conventilleros". Esta dura realidad llena de prejuicios perduró desde la llegada de los primeros grupos a fines del siglo pasado hasta mediados del siglo XX.
Durante los años iniciales a su asentamiento en la ciudad, la familia Cura redobló esfuerzos, en especial Doña Teresa. La mujer, robusta y alta de tez morena que describen como honesta y luchadora, impo­nente en su presencia y carácter "Tenía un pariente en Buenos Aires". Recibió la ayuda y protec­ción de Don Carlos Veroni y su hermana Adela Veroni quienes brindaron los primeros conocimien­tos de idioma castellano a la joven Teresa, y educación a los hermanos Cura. Teresa transmitiría a su primogénito, Jorge su amor por su tierra natal. Apoyó a sus hijos varones en colaboración con su hija menor Rosa emprendiendo claramente una idea de empresa conjunta. Cuando ya sus hijos varones estaban asentados, acostumbraban reunirse todos a comer comida árabe una vez por mes, "era una fiesta" recuerda María del Carmen Cura, nieta de Doña Teresa y quien la acompañó al Líbano junto con su primo "el negro" en agosto de 1951.
De lustrabotas a empresario
La dura infancia del niño lustrabotas no aplacó sus aspiraciones de superación. Nos asombra encontrar tanto en los testimonios orales y escritos alusiones a sus cualidades referidas a poseer visión y veta comercial, puesto que es meritorio destacar que el niño Cura solo asistió hasta el 3o grado de la escuela primaria en el Colegio San José de La Orden Salesiana de Don Bosco. Jorge pasó una temporada en la localidad de Canals, provincia de Córdoba, donde se desempeñó en un negocio de Ramos Generales de la firma Aramburu. conocido del Señor Veroni.
En 1921 contrajo matrimo­nio con Enriqueta Colombo. descendiente de italianos. Doña Enriqueta fue hija de Cayetano Colombo y Ana Piersione de Colombo. oriundos de Canals.
Del matrimonio nacieron Teresa. Carlos Cayetano, Mario Raúl, Ana Nélida, María del Carmen, Jorge Enrique. Doña Enriqueta Colombo de Cura falleció en 1973.
Entre 1920 y 1922 Jorge y José inician la actividad comercial en Artículos Rurales hasta constituir Cura Hnos y llegar a ser grandes empresarios del Acero.
En 1932-1934 integró el Concejo Deliberante de la ciudad de Rosario, por el Partido Demócrata Progresista.
Jorge Cura apoyó y fomentó las actividades culturales de la ciudad, actuó como mecenas de artistas como Julio Vanzo quien fuera amigo personal de nuestro biografiado. Como hijo del Líbano, participó de! crecimiento de la Sociedad Libane­sa de Rosario, y llegó a lograr el Consulado Honorífico el 16 de diciembre de 1951. La noche del mismo 16 de diciem­bre, falleció de un ataque cardíaco en el Sanatorio Americano de la ciudad que lo albergó desde su llegada en 1898.
Jorge Cura como muchos otros inmigrantes, llegados a nuestro país, brindó con humildad y tesón toda su vida. Decía al respecto "la vida es una canción que merece ser vivida".
* Profesora.
' La inmigración de Medio Oriente en la Argentina, por Gustavo Dalmazo y Héctor Francisco. Todo es historia N" 412. página 20. Noviembre 2001. Para ampliar el tema ver "La inmigración árabe en la Argentina" de Tasso. Alberto en Todo es Historia N" 282. 1990.
"Entrevista Elida Lulo, marzo 2005
'Entrevista Mana del Carmen, Abril2005. ampliar texto Fernando Devoto sobre redes familiares e información
Fuente: extraído de la Revista “Rosario y su historia” Fascículo N• 35 de Octubre de 2005