viernes, 31 de julio de 2015

ACTIVIDAD PORTUARIA



Por Miguel Angel De Marco

Se ha dicho que el puerto seguía ocupando un importante papel, pese a que las instalaciones resultaban reducidas para el intenso movimiento que en él se registraba. Pues, al decir de la Bolsa de Comercio en un documento elaborado en 1929, había sido previsto para una capacidad inicial de 1.310.000 toneladas, que en aumento progresivo debía llegar a las 2.500.000 en 1930 —según mencionamos en el capítulo anterior—, pero en 1927 había alcan­zado las 6.837.657 toneladas.
Una dificultad para que los buques de gran calado accedieran libremente al puerto de Rosario la constituía el largo trecho que debían cubrir para entrar en el Paraná, pues tenían que retroceder hasta el canal de acceso al puerto de Buenos Aires, tomar el de Martín García y luego el Paraná Guazú
En 1893, el ingeniero Emilio Mitre había proyectado abrir una vía por tierra firme, a lo largo de la provincia de Buenos Aires, entre Puerto Nuevo y Lujan.
Recién en 1910 el Congreso sancionó una ley al respecto. Pasaron los años hasta que en 1923 comenzaron los trabajos, que fueron proyectados en cuatro ci.ipas: la primera concluyó en 1930, año en que quedaron suspendidos los trabajos. Transcurrieron varias décadas hasta que en 1976 se inauguraron las obras de dragado, muros de encauzamiento, iluminación y canal de 30 pies de calado, lo que provocó un acortamiento de la distancia y un abarata­miento de los fletes. r
Pero, no obstante lo dicho, en 1921 se alcanzó uno de los mayores promedios del país en exportación de lino, con un 47,73 por ciento del total nacional.
El comercio y la industria registraron un notable incremento. El censo correspondiente a dichas actividades de los años 1828-1829 consignó que en el departamento Rosario se concentraba el 43 por ciento de los capitales existentes en la provincia de Santa Fe.
Fuente: Extraído de Libro “ Rosario desde sus orígenes hasta nuestros días” Síntesis Histórica. Editorial Librería API  2º Edición. Rosario 1984.