martes, 15 de junio de 2010

JUANA ELENA BLANCO - MAESTRA DE LOS HUMILDES





Por Micaela Pereyra


Educar a los niños pobres fue la razón de ser de Juana Elena Blanco, considerada a sí misma como una "modestísima obrera de la difusión cultural". Entendió la docencia como un trabajo, no sólo ya como un acto vocacional de beneficiencia, y sumó la institución escolar a la construcción y organización de la Nación en las primeras décadas del siglo XX.
"Al niño argentino hay que enserñale que un pueblo que no tiene independencia económica y capacidad productora de la independice del capital e industrias extranjeras sólo será considerado una factoría por los pueblos fuertes que saben bastarse a sí mismo. Que el orgullo nacional no es patriotismo, sino cuando es altiva dignidad . Y que, para ostentarse como timbre legítimo, hay que preparse ni sometimientos"Juana Elena Blanco centró la enseñanza en la capacitación en centró la enseñanza en la capacidad en oficios para que, sobre todo los humildes, puedan " "producir para bastarse por sí mismos".
Vivió 59 años, siempre en Rosario, donde formó la primera promoción de maestras graduadas en 1881 en la Escuela Normal, hoy Nicolás Avellaneda. Apenas recibida se fue a trabajar a las escuelas suburbanas, situadas en la entoncés apartado barrio de San Francisquito.Animada por una prodigiosa fuerza interior, planificó la forma de incporar a esos niños a la escuela, y también alimentarlos, vestirlos, controlar su salud, "protegiéndolos con amor y educándolos para que mañana sean útiles". Acompañada por su madre y su hermana, su tarea encontró apoyo en otros que se hicieron eco de su obra solidaria.Algunos con dinero y otros con trabajos contribuyeron a la creación , en 1905 de la Sociedad Protectora de la Infancia Desvalida, un hogar escuela que se pobló de niños. Luego, desde ahí, comenzo a concretar su proyecto de aula taller, escuela oficios enmarcada en la corriente de la Escuela Activa, una idea de avanzada concebida a luz del positivismo de es entoncés, que admitía el movimiento del alumno, promovía la participación activa y el trbajo manual, al contrario del modelo imperante en la época del niño quieto y las aulas silenciosas. Dos años después comenzaron los talleres manuales, adquieron una imprenta y comenzó a editarse la revista " La Infancia". Fundó la las escuelas Nº 1 y Nº 2, con instalaciones de talleres, con instaladas de talleres, nutridas bibliotecas y carácter de escuela hogar. Sus escuelas eran mixtas, con una alta concurrencia de niñas, ya que la capacidad de mano de obra femenina era central en las acciones pedagógicas."Se enseñan las industrias que pueden llevar el bienestar a los hogares obreros, donde la laboriosidad del ama de casa puede triunfar de la miseria, que en muchos casos es producto de una mala educación". Las mujeres trabajaban en especialemente en el aprovechamiento de los desecho". "Todas las madres sabrán transformar en un traje para sus hijos el más insignificante pedazo de tela". "El destino del que nació sin bienes de fortuna debe ser el trabajo", insistiía y por eso consideraba fundamental desarrollar la enseñanza industrial. Precisamente por este enfoque clasista de proponer la capacidad de oficio sólo ppara los niños y niñas pobres y por impulsar la recompensa económica individual por el trabajo realizado en la escuela, fue criticada posteriormente. De todos modo, Juana Elena Blanco hizo lo que muy pocos en su época: con ímpetu recorrió los barrios rosarinos más carenciados para civilizar, educar y enseñar labores porque, como proyectaba en discursos, " el trabajo dignifica la vida humana".

Bigliografía extraida de revista de la Capital 140 años.